Adán Silvera y Ruymán Delgado andan desde hace pocas fechas como niños con zapatos nuevos. Su fichaje por la promotora catalana de Gallego Prada y su retorno a los cuadriláteros el próximo 7 de noviembre los tiene de enhorabuena.

Los dos alumnos aventajados de José Manuel Febles inician este fin de semana una nueva vida dentro del boxeo. Imbatidos ambos como profesionales, se adentran en un camino que debe llevarlos hacia peleas titulares. A eso aspiran y para ello entrenan aunque su última comparecencia sobre un cuadrilátero date del 1 de abril de este año.

“Nosotros no hemos querido tener este parón, no ha habido oportunidades por agentes externos a nosotros, pero hemos seguido entrenando y después de tanto tiempo tenemos ganas de subir, de hacerlo bien, de demostrar la evolución y que estamos ahí preparados para cosas mayores”, admitía ayer un más que ilusionado Ruymán Delgado, que este sábado tendrá enfrente a un rival complicado, el georgiano George Aduashvili (20 victorias, 15 derrotas y un nulo con 9 triunfos antes del límite). El fajador tinerfeño confesaba que estaba muy satisfecho por incorporarse al equipo de Gallego Prada después de haberse visto “en el pozo, después de tanto tiempo entrenando en la sombra, estando a tope para cuando llegara la oportunidad”. “Me siento afortunado y privilegiado, para mí es la mejor promotora de España y a nivel internacional es muy competente también”, señalaba el diamante tinerfeño, que ve el ejemplo de los grancanarios Jerobe Santana y Nebil Krissi, compañeros de promotora “a los que hay que ver la pedazo de carrera que les están haciendo”.

“Si la idea es hacer lo mismo con nosotros es para estar a tope de motivación”, argumentaba el dos veces campeón de España amateur antes de referirse a su rival de este fin de semana, admitiendo que “no lo conozco. He visto por YouTube algún trocito de vídeo pero yo creo que ese no es mi trabajo, es más trabajo de mi entrenador y él ya lo habrá visto y analizado para después dirigirme a mí los entrenamientos para llegar en las mejores condiciones a la pelea. Sé que tiene un récord mucho más amplio que el mío, con 36 peleas, 20 victorias, nueve nocauts. Por su trayectoria se ve que es fuerte y que tiene que pegar, los georgianos se caracterizan por ser fuertes y no rehuir las peleas, pero estoy muy motivado y creo que es una prueba de fuego para ver cómo estoy yo para hacer cosas más grandes”.

Aduashvili, además de su récord, ha compartido el mismo cuadrilátero con gente de alto nivel como el británico Martin Murray o el polaco Thomas Adamek, además de un púgil sólido como su compatriota Levan Jomardashvili, entre otros, pero no asusta a un Ruymán que entiende que “hay que seguir dando pasos para hacer cosas, por ejemplo, para ir primero a por el cinturón de España, pero son cosas que no me he planteado, prefiero ir combate a combate y en eso estoy pensando, en el de este sábado. Salir, liarla, hacer un buen papel y después que hablen los demás. Esta será mi sexta pelea y quiero ganar de forma contundente para que después la gente hable y sean los que digan. Y después que venga lo que venga y que sea la fusión entre Gallego Prada y mi entrenador la que determine cuál será el siguiente paso”.
Su compañero de fatigas, Adán Silvera, volverá a subirse al ring tras su épico triunfo de abril ante Fatah Baghban, al que retiró del boxeo noqueándolo en el tercer asalto después de que el tinerfeño sufriera una brecha y que el médico amenazara con pararle el pleito. El retorno de Jerday Arzola será otro de los atractivos.