CULTURA

Los rostros del abandono

Sara Yun, ayer, delante de dos de las imágenes de su colección Óxido. / ANDRÉS GUTIÉRREZ
Sara Yun, ayer, delante de dos de las imágenes de su colección Óxido. / ANDRÉS GUTIÉRREZ

La artista grancanaria Sara Yun firma la primera exposición de la XIII edición de la Bienal Internacional de Fotografía de Tenerife Fotonoviembre. Una reflexión sobre la capacidad de lucha del ser humano, titulada Óxido, que hasta el próximo día 17 se puede visitar en el espacio Tienda de TEA Tenerife Espacio de las Artes. “Creo en el poder de la imagen para cambiar conciencias”, señaló ayer Sara Yun ante sus trabajos, en los que descubre el día a día de cuatro de los 22 tripulantes de un barco que fue abandonado por su armador en el Puerto de Luz de Las Palmas de Gran Canaria, a miles de kilómetros de sus hogares.
Yun estuvo acompañada en la inauguración de la muestra por la consejera del Cabildo Coromoto Yanes; la vicepresidenta del Gobierno de Canarias, Patricia Hernández; el director del Centro de Fotografía Isla de Tenerife, Antonio Vela; y por Cristóbal Valderas, presidente de Clece, empresa de ayuda a domicilio que ha producido y patrocinado la exposición. También asistió a la presentación uno de los protagonistas de la historia, Issa Sidi Fall.

La grancanaria ha querido sacar a la luz en Óxido las vidas de este grupo de personas que malvivieron durante cinco años en el barco, y sin papeles, sin dinero y sin trabajo lograron sobrevivir gracias a la caridad de algunas personas y a la asociación Stella Maris, que les abasteció con algunos víveres indispensables. El Iballa G estaba situado en tercera fila en el muelle junto a otros dos barcos que estaban también abandonados. El petrolero corrió el riesgo de hundirse una vez, pero la rápida actuación de los marineros, que cortaron los cabos que le unían al barco, ahora hundido, permitió que no ocurriera una tragedia. Para llegar al Iballa G había que pasar por otros dos barcos. Para subir al primero era necesario ascender por una escalinata de cuerda y tablillas de unos 10 metros. Para acceder al segundo había que saltar y agarrarse a una cuerda para no caer al mar y pasar por una plancha de metal. Tres días antes de que Sara Yun empezara esta serie fotográfica, falleció Birara Mellese (Etiopía) intentando pasar del primer al segundo barco. “Esta serie va dedicada a él”, dijo Yun, que en 2011 fue finalista en el Concurso Descubrimientos PhotoEspaña con su serie Detrás de la máscara.

En junio de 2014 se llevaron el barco petrolero Iballa G a Turquía, no se sabe bien si fue para llevarlo a un desguace o para repararlo. Es entonces cuando los marineros, que llevaban ya cinco años viviendo en el petrolero, tuvieron que salir del barco y buscar un nuevo refugio.