SANIDAD

Salud Pública realiza más de 11.000 inspecciones por la Ley Antitabaco

Aprobada a finales del año 2010 con el objetivo de establecer una serie de medidas sanitarias frente al tabaquismo y la regulación de la venta, el suministro, el consumo y la publicidad de los productos del tabaco, la conocida como Ley Antitabaco tuvo una enorme repercusión social, ya que entre otras cuestiones fue la primera en la que se extendía la prohibición de fumar a cualquier tipo espacio de uso colectivo y local abierto al público que no estuviera al aire libre.

Para propiciar un mayor control y efectividad de la norma, las comunidades autónomas pusieron en marcha, en el marco de sus competencias, una serie de acciones para velar, sobre todo, por la protección de los ciudadanos

-especialmente de los menores- y los no fumadores. En este sentido, y según datos aportados por la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de Canarias, desde enero de 2011 se han realizado 11.600 inspecciones a establecimientos, empresas e instituciones públicas de las Islas. Del total, 2.092 se llevaron a cabo el año pasado, donde además se tramitaron 25 expedientes por infracciones graves de la ley.

Dichas infracciones supusieron multas que oscilaron entre los 600 y 10.000 euros, aunque la mayoría estuvo entre los 605 y 1.000 euros. Y es que, según explica al DIARIO el director general de Salud Pública de la Consejería de Sanidad, Ricardo Redondas, estas sanciones son incoadas por infracciones vinculadas a la salud, pero hay otros organismos que también son competentes en esta materia, como la Policía, Agencia Tributaria, etc.”. Igualmente, Redondas señaló que “en el 13% de las inspecciones realizadas en 2014 se detectó un incumplimiento de la normativa, pero no en todos los casos se produjo una sanción, porque a criterio del inspector algunos de los problemas detectados eran fácilmente corregibles y había voluntad por parte de los infractores. Por eso, muchos se solucionaron sin multa”.

Para el director general de Salud Pública, la Ley Antitabaco hace especial hincapié en la prevención, al igual que ocurre con la reciente subida de impuestos al tabaco. Dicha subida, que incide sobre una franja que es competencia de Canarias, “podría tener un impacto en las Islas de casi 15 millones de euros, pero esa estimación está hecha en base a que se mantenga el mismo consumo el año que viene, cuando lo que se pretende realmente con este tipo de medidas es lo contrario, disminuirlo”. “En las estrategias antitabaco, a quien más ayudan estas subidas de precios es a los jóvenes, porque son más sensibles a los aumentos de precio y acaban comprando menos”, recalcó Ricardo Redondas, quien aseguró que en el nuevo plan de drogodependencias de Canarias, que pasará a llamarse Plan de Adicciones, no solo se van a incluir las adicciones sin sustancia, como el juego o el abuso de las nuevas tecnologías, sino que se van a desarrollar “estrategias específicas contra el tabaco”. “Estamos observando que el tabaco guarda relación y tiene una fuente común con otras drogas, como la cocaína o la heroína, especialmente en la infancia y la juventud, y las formas de prevención del consumo son las mismas, fomentando hábitos saludables, mejorando la autoestima, dando herramientas para soportar la presión del grupo o desarrollando capacidades críticas frente a la publicidad”, concluyó.

[sws_grey_box box_size=”100″]Canarias, única región donde se financia al 50% el tratamiento para dejar de fumar

Canarias es actualmente la única comunidad autónoma donde se financia el 50% del tratamiento para dejar de fumar, a través del llamado Programa de Ayuda al Fumador de Canarias (Pafcan). Para acceder al mismo, los pacientes deben ponerse en contacto con su profesional sanitario en el centro de salud o en el hospital. A continuación, el facultativo valora cada caso y puede incluir al paciente prescribiendo uno de los dos tipos de fármacos con los que cuenta el citado programa. El seguimiento de los adictos puede ser individual o en grupo y se ha establecido un periodo intensivo de tratamiento de 12 semanas.

La medicación se distribuye a través de las oficinas de farmacia de todo el Archipiélago. El primer envase prescrito lo debe abonar el paciente y el segundo envase se le proporciona de forma gratuita, y así sucesivamente con el resto del tratamiento.

En el programa Pafcan participan profesionales con formación específica en tabaquismo, de los que ya hay en 102 centros de salud de las Islas. Gracias a ellos, más de 2.000 pacientes han iniciado el tratamiento dentro del programa en sus casi dos años de funcionamiento. [/sws_grey_box]