tribuna

#20D Segunda vuelta: Tripartito o crecimiento – Por Cristina Tavío Ascanio*

Este domingo, 20 de diciembre de 2015, queremos ganar las Elecciones Generales para seguir dando estabilidad a un país que ahora funciona y avanza. Yo les quiero animar a ver estos comicios como una segunda vuelta, vistas las encuestas que nos han dejado este escenario: votar a un Gobierno estable del Partido Popular, o elegir a un incierto Gobierno tripartito.

El voto al Partido Popular es el voto para el empleo, el crecimiento y el mantenimiento de las pensiones. Los otros, que aspiran a entrar en ese hipotético tripartito de perdedores, tienen otras prioridades: cansa escuchar a Podemos, Ciudadanos y sobre todo al PSOE pintando una España negra y tenebrosa. Esa no es la España del Partido Popular. Vivimos en un gran país, con un sistema de bienestar como no hay en casi ningún lugar del mundo, con 75 millones de turistas extranjeros, líder en exportaciones de bienes y servicios.

No podemos tirar por la borda todo lo que ha avanzado España, que ha pasado de liderar el desempleo en Europa a crear 1.400 empleos diarios. Estábamos en recesión y hoy crecemos. Aquí no hay milagros, solo el sacrificio de un país que entró en el modelo del euro con muchas dificultades, agravadas con una crisis supranacional nunca reconocida por el anterior Gobierno socialista, que negó que estábamos despilfarrando, esquilmando nuestra productividad.

2012 fue durísimo. Los españoles fuimos conscientes por vez primera de nuestra difícil situación. Otro presidente hubiese permitido que nos rescataran, que Europa impusiera reducciones drásticas de nuestras pensiones y que se despidiera a funcionarios, con una prima de riesgo por encima de 600 puntos y miles de familias con todos sus miembros en paro. Mariano Rajoy supo fajarse ante las adversidades, reformar y resistir. Y, ahora lo veo así, España resistió con él. Llevamos cuatro años trabajando para tener el apoyo de una inmensa mayoría de los españoles, y esos esfuerzos se han redoblado en una campaña intensa, enfocada a definir un modelo de futuro. Votando a Mariano Rajoy sabemos lo que votamos. Votamos a una persona que se está dejando la piel por España. Si no hubiera sido por él, ahora estaríamos rescatados.

En esta campaña electoral que termina, el presidente ha sabido explicar lo que se ha hecho y todo lo que se quiere hacer para profundizar en la recuperación y seguir creando empleo y bienestar, mientras los demás candidatos no han sabido articular ni una propuesta. Otros se crecen en el terreno del insulto.

Es bochornoso ver a Pedro Sánchez, candidato del PSOE, manejarse tan cómodamente en ese fango, y hablar de decentes e indecentes, de déficit público o de empleo, cuando su partido nos dejó tres millones y medio de parados más en cuatro años.

Los socialistas están a la desesperada, luchando por no desaparecer. Podemos y Ciudadanos les relegan a un papel peor que el de segundón: les condenan a diluirse en un tripartito con tal de que no forme gobierno la que será la opción más votada, el Partido Popular, claro ganador en todas las encuestas.

Mientras usted lee este artículo, estos tres partidos siguen peleándose por ver quién va a liderar ese Gobierno tripartito. En esta segunda vuelta del 20D, votar a quienes están luchando por no ser últimos en las urnas es votar la incertidumbre y las ocurrencias: subir el IVA de productos esenciales como el pan y la leche, crear un impuesto para sostener las pensiones, o equiparar la violencia de género a otros tipos de violencia. Además, ¿alguien me sabe decir cuál es la ideología de Ciudadanos? ¿Saben quiénes acompañan a Iglesias en las listas de Podemos? Unos se arriman al sol que más calienta, según les conviene, y no saben ni qué son más allá del color naranja. Y los otros, Podemos, han tenido que rectificar un programa irrealizable, capaces de justificar el modelo de país de Chávez y Maduro, que han financiado sus campañas.

Ese pacto de perdedores sería lo peor que podría pasarnos. Conocemos experiencias de tripartitos en Galicia y en Cataluña, por ejemplo, casi siempre para dejar fuera al Partido Popular. Son pactos malos para los vecinos y para el empresario, generan inestabilidad y duplican el gasto.

Por eso, las elecciones de este domingo son una segunda vuelta: los españoles estamos en una encrucijada entre ese fatídico tripartito de perdedores y el Partido Popular de Mariano Rajoy, con todos sus defectos, porque habrá cosas más que mejorables, pero también con todo lo bueno.

El más brillante de nuestros logros es el empleo, que nos da libertad y nos hace partícipes del sostenimiento de una sociedad con la mejor sanidad pública del mundo, infraestructuras de primer orden y un sistema público de pensiones garantizado por Ley. 2014 y 2015 han deparado un millón de empleos más. Si seguimos al mismo ritmo, en 2020 habrá 20 millones de españoles trabajando. Vamos a darnos la oportunidad.

Yo les animo a ir a votar este domingo, y les pido que voten por el Partido Popular, por nuestros candidatos canarios al Congreso y al Senado, pero que muy especialmente voten por Mariano Rajoy como presidente del Gobierno. Es tiempo de que votemos con cabeza y corazón. Pensemos que, pasado lo más duro, es tiempo de seguir adelante.

Tiempo de tomarnos nuestro futuro, Canarias y España en serio.

*Vicesecretaria general de Acción Sectorial del Partido Popular de Canarias