entre risas

Guadalupe González: “Estaría bien usar la psiquiatría en política”

La expresidenta del Cabildo de La Palma y actual primera teniente de alcalde de Santa Cruz redescubre el Parlamento de Canarias.

-Palmera, sube a la palma…

[Canturrea] “Y dile a la palmerita que se asome a la ventana, que su amor la solicita…”.

-¿Qué panorama se ve desde el balcón del Cabildo en esta etapa?

“Las ventanas del Cabildo dan a una futura playa estupenda”.

-¿El acuerdo de CC con el PSOE es compacto?

“Sí, claro. Los acuerdos son compactos hasta que dejen de serlo [sonríe]”.

-¿Por qué no funcionó la otra vez?

“Hubo un montón de problemas que afortunadamente se han superado y esperemos que no se repitan”.

-Como experta, ¿qué utilidades tienen las cáscaras de plátano?

“Eso en tres minutos no da tiempo. Mira, con los residuos de los plátanos se hace harina, pienso, aceite, se saca energía… Para una conferencia de una hora y media [ríe]”.

-¿La Comisión Europea ha resbalado al reclamar explicaciones a España sobre las subvenciones?

“Vamos a ver, el plátano y todos los asuntos canarios en general, en la Unión Europea y en todos lados, son complicados de defender siempre, porque son como muy singulares”.

-¿Es conveniente la intervención de la psicología para resolver algún conflicto político?

“Pues, la verdad es que sí. Estaría bien. No solo para conflictos políticos. Y los psiquiatras también, ¡eh!”.

-¿Tan grave está la cosa?

“Tengo un hijo psiquiatra; así que, como tú comprenderás, soy superdefensora de este colectivo [risas]”.

-¡Dios me libre!

“A lo mejor, una buena terapia a tiempo [ríe], antes de que uno empiece a desvariar…”.

-Hablando de locuras, ¿la triple paridad es una parida?

“¡Qué va! La triple paridad es un invento que ha sido esencial para el desarrollo equilibrado de Canarias y ojalá no se nos ocurra cambiar una cosa que funciona para hacer un experimento. Canarias llevaba siglos desarrollándose de forma desequilibrada y la triple paridad ha ayudado mucho a que los que vivimos en islas menos pobladas nos sintamos un poquito canarios de primera división”.

-¿Es imprescindible un salto evolutivo para salvar a Coalición Canaria?

“¡Hombre, evolutivo no! Avanzar, sí. Seguir conectando con la realidad. Hemos hecho un esfuerzo en las elecciones por apostar por gente con ímpetu y ganas, y tenemos que continuar en ese camino de no separarnos de la sociedad a la que nos debemos”.

-¿Pasarías una noche en el salón de sesiones?

“¿Por qué no?”.

-Es que hay quien teme a los fantasmas…

“¡Ah! Sí, no sé [ríe]… Si la tengo que pasar, la pasaría. ¡Por supuesto! Hemos tenido debates que se han prolongado hasta bastante tarde. Si aparece un fantasma, habría que salir corriendo, simplemente [risas]”.

-¿Qué es lo más terrorífico del Parlamento?

“No es una institución que produzca terror. Por lo menos, a mí no [risa nerviosa]. Al final, somos sesenta personas, independientemente de nuestras ideologías, con nuestros días buenos y malos, conviviendo durante cuatro años…”.

-¿Cuál es el mejor chiste que te han contado?

“¡Ya tú ves!, aquí no me han contado chistes”.

-El humor fomenta el bienestar y la creatividad. ¿De qué se ríen sus señorías?

“¡Uf! Aquí dentro, de alguna metida de pata en algún momento. Ahí fuera, mucho más”.

-El 4 de abril es el Día Internacional de la Diversión en el Trabajo. ¿Habría que convocar un pleno monográfico para celebrar la fecha?

“No diría tanto diversión como ilusión. El trabajo te sí tiene que entusiasmar. Deberíamos recordar por qué estamos aquí y por qué luchamos”.