No cabe duda de que la política se encuentra marcada por los tiempos. Alguien escribió una vez que “no hay mayor competencia que la propia incompetencia de uno mismo”, y en el Partido Popular hemos tenido debilidades, por las que pedimos perdón, y fortalezas, para las que pedimos respeto. Hemos fallado, pero también hemos acertado gracias al esfuerzo de todos los españoles, de todas las ideologías y las políticas reformistas de este gobierno, a todas luces necesarias.
La unidad de medida de tiempo en una democracia es una legislatura (cuatro años), en la que desde el primero hasta el cuarto todos tienen igual importancia. Nuestra hoja de ruta, marcada hace ya cuatro años, se centraba en lograr una recuperación de la economía muy mermada por la crisis económica y el enorme agujero que dejaron en las arcas el Gobierno saliente. Corría entonces la sombra de que España sería intervenida, riesgos de desplome de nuestra economía, se nos comparaba con el corralito de Argentina o incluso con la esperpéntica situación de Grecia (a la que algunos pusieron como ejemplo de buen hacer), pero siempre soportando una presión sin precedentes en Europa, y que muchos no han reconocido el esfuerzo decisivo y permanente que se ha hecho para evitar la intervención, situación que hubiese sido nefasta para nuestra sociedad, imponiéndonos criterios desde fuera que hubiesen sido insoportables para los ciudadanos.

Hoy, solo cuatro años después de esa situación, España ha pasado de ser intervenida y convertirse en el primer país de la Unión en destrucción de empleo, a ver como su economía crece y convertirse en el que más puestos de trabajo crea.

Hemos logrado que España se recuperara de una situación heredada, y que casi nos deja bajo tierra. El Partido Popular apeló a su Experiencia, la Estabilidad y el Empleo para reforzar los pilares de las políticas sociales, logrando una recuperación en tiempo récord, y sin llegar a ser una Grecia ni un corralito más.
Con el esfuerzo de todos los canarios y españoles, hemos logrado pasar la peor situación que jamás nos hubiéramos imaginado. Hemos soportado recortes y presiones, pero hoy podemos decir que la recuperación es una realidad palpable. Nuestra economía crece. Con ella la creación de empleo, que nos deja el dato del pasado mes de noviembre como el mejor de toda la serie histórica de España.

Pero esa tendencia debe seguir. Esa apuesta por un futuro mejor para todos, debe tener como pilares la Estabilidad, la Experiencia y el Empleo.
Creo enérgicamente en que el Partido Popular debe seguir trabajando por el bien de todos los ciudadanos, y por ello mi candidatura al Senado por la isla de Tenerife.
Mi profesión de doctor y cirujano no me permite vivir de la política. Entre otras cosas porque considero que soy administrador y representante temporal de lo público y de mi pueblo, no propietario de nada.

Bajo ese argumento, pido votar libremente, pero con conciencia. Les pido apostar por la Experiencia, Estabilidad y el Empleo. Es dejar a Tenerife en buenas manos. Es apostar por un futuro mejor para todas y todos, sin distinciones.

*Candidato al Senado por Tenerife