Los presupuestos de la Gerencia Municipal de Urbanismo para 2016 recogen un incremento en la partida de ingresos del 563%. Un porcentaje tan espectacular obedece a la inclusión de los 560.000 euros que el área que dirige Carlos Garcinuño reclama al Cabildo de Tenerife por la tasa de ocupación del solar donde se alzan las cocheras de TITSA en el polígono de Cuevas Blancas, en el barrio de Santa María del Mar. Según detalló Garcinuño, que dijo no saber si esa tasa se ha pagado alguna vez, lo que han hecho “es reclamar los últimos cuatro años, que es lo que nos permite la ley”. Concretamente, a razón de 140.000 euros por año desde 2013 e incluyendo la correspondiente a 2016, lo que suma ese poco más de medio millón de euros.
Según se recoge en la memoria de los presupuestos, se trata de una previsión de ingresos del alquiler durante los años 2013, 2014, 2015 y 2016 de una parcela de naturaleza urbana obtenida en virtud de las cesiones correspondientes a la participación en el aprovechamiento urbanístico. El edificio que TITSA tiene en Cuevas Blancas se inauguró en 2001, por lo que, si esa tasa de ocupación que ahora reclama Santa Cruz no se hubiera pagado nunca, se estaría hablando de una cifra cercana a los dos millones de euros.
El concejal de Urbanismo no quiso entrar en más detalles sobre este asunto y prefirió destacar en el apartado de ingresos el incremento que se va a producir por la reactivación económica en la ciudad que, aseguró, ha permitido que en lo que va de año se duplique el número de expedientes de obra tramitados.
La otra gran partida de los 10 millones de euros con los que cuenta Urbanismo es la destinada al desarrollo del planeamiento pendiente. Concretamente se dispone de más de cuatro millones de euros para este fin que se concretan en los trabajos para levantar la suspensión del Plan General, el desarrollo de los dos planes externalizados (Antiguo Santa Cruz y Los Hoteles), la sustitución de viviendas en Tíncer, la redacción del proyecto del Templo Masónico, la culminación de la reforma de la Casa Siliuto y la anualidad correspondiente al cementerio de San Rafael y San Roque.
Reconoció Garcinuño que en lo referente al Plan Especial de El Toscal no tiene previsión de su puesta en marcha. “Tenemos a dos técnicos trabajando en exclusiva en él para solventar los reparos del Cabildo y confiamos en que esté en el primer semestre de 2016”. En previsión de que eso sea así, Urbanismo ha reservado una partida de 500.000 euros para llevar a cabo expropiaciones en El Toscal.
Proceso selectivo
Para sacar adelante todo el planeamiento que está pendiente (más de 60 documentos esperan su turno en la Gerencia), Urbanismo ha puesto en marcha una bolsa de contratación para contar con arquitectos, aparejadores y auxiliares administrativos. Aunque los plazos previstos para hacer la selección de los candidatos estaban fijados para finales de este mes, reconocía ayer el concejal del área que ha sido tal el volumen de personas que se han presentado para participar en el proceso selectivo, que se han retrasado las pruebas hasta la primera quincena de enero. Más de 100 arquitectos, 200 aparejadores y más del doble de auxiliares administrativos son las cifras de esta convocatoria.
Un millón para Patrimonio Histórico
El Ayuntamiento de Santa Cruz destinará en 2016 algo más de un millón de euros a la rehabilitación de patrimonio histórico, una cantidad que se reparte entre distintas concejalías, fundamentalmente entre Infraestructuras y Urbanismo. Así, a los 270.000 euros para terminar la rehabilitación de la Casa Siliuto, los 150.000 para el proyecto del Templo Masónico y la anualidad de San Rafael y San Roque de 48.000 euros, cantidades dentro del presupuesto de Urbanismo, hay que sumar los 400.000 euros de la rehabilitación de la plaza de Los Patos, la intervención en la iglesia de San Andrés o la que se va a realizar en la antigua Escuela de Comercio de Santa Cruz.
La edil del área, Yolanda Moliné, detalló que su concejalía se encargará de la gestión directa de la partida de 100.000 euros destinada a la creación de un plan de divulgación del patrimonio histórico. “Además queremos hacer un diagnóstico del estado en el que se encuentra nuestro patrimonio y para ello queremos hablar con el Cicop, que ya se encarga de la gestión del de La Laguna y de Los Realejos”. Junto al diagnóstico, detalló Moliné, también se hará un plan de rehabilitación con las prioridades de intervención.
A esto hay que sumar la inversión de 100.000 euros que el Gobierno de Canarias tiene prevista para actualizar el proyecto del Viera y Clavijo y lo que cueste poner en funcionamiento el Palacio de Carta tras la cesión.