SUCESOS

Aparece una boa ‘tragavenado’ en la piscina de un hotel del Puerto

Empleados de un hotel ubicado en el término municipal del Puerto de la Cruz encontraron ayer a una boa constrictor de cola roja, popularmente conocida como tragavenado en países de la cuenca amazónica, nadando en la piscina del establecimiento, en información facilitada por testigos y corroborada por los servicios actuantes.

El ejemplar, que aunque joven al parecer presenta problemas de salud al resentirse de las temperaturas en el norte de la Isla por esta época del año, mide un metro y medio de largo aproximadamente y, tras ser capturada en el lugar, ya se recupera gracias a los buenos ciudados que le ofrecen los especialistas de la Fundación Neotrópico.

Los trabajadores del negocio la localizaron nadando en la mañana de ayer. / FUNDACIÓN NEOTRÓPICO
Los trabajadores del negocio la localizaron nadando en la mañana de ayer. / FUNDACIÓN NEOTRÓPICO

El sorprendente hallazgo que nos ocupa se produjo a primera hora de la mañana de ayer, cuando los trabajadores detectaron a la serpiente en cuestión nadando en la piscina del hotel.

Como es natural, dieron la voz de alerta a las autoridades, personándose en el negocio efectivos de la Policía Local del Puerto de la Cruz y del Cuerpo Nacional de Policía. A su vez, el Centro Coordinador de Seguridad y Emergencias (Cecoes) 1-1-2 del Gobierno de Canarias activó a la citada Fundación Neotrópico para hacerse cargo del espécimen en cuestión.

Cuando los biólogos llegaron al hotel se encontraron con que los propios empleados, al parecer guiados por alguno de ellos que al ser de ascendencia venezolana reconoció la serpiente como una tragavenado y, por ende, no venenosa, habían sacado la boa del agua con la ayuda de la red utilizada habitualmente para retirar hojas y similares de la piscina.

SERPIENTE1De cola roja
Puestos al habla con el presidente y coordinador de investigación de la Fundación Neotrópico, Jaime de Urioste, confirmó el buen ojo del venezolano que la identificó en el hotel: se trata de una boa constrictor o boa de cola roja, común sobre todo en la zona del Amazonas.

De Urioste explicó que esta serpiente es un animal joven que como mucho tendrá un par de años y mide aproximadamente metro y medio, si bien de adultos puede llegar a los 40 años y alcanzar un tamaño de unos tres metros. Dada su juventud, el biólogo apuntó que no resulta sencillo dictaminar aún si se trata de un macho (que son más grandes en la edad adulta) o una hembra.

Sobre su aparición en la Isla, el especialista de Neotrópico solo tiene una duda: o el dueño la abandonó o se le escapó. Obviamente, llegó a Tenerife de contrabando al ser una especie protegida por el CITES (Convention on International Trade in Endangered Species of Wild Flora and Fauna, Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres). Aunque la serpiente mostró su fiereza cuando De Urioste se hizo cargo de la misma (vean las imágenes de vídeo en diariodeavisos.com), el biólogo teme que esté enferma, quizás aquejada de neumonía, tal y como podría desprenderse del sonido que emite al atacar, distinto al habitual. Hay que tener en cuenta que esta especie no tolera bien que el termómetro descienda de los 18 o 20 grados. En cuanto al lugar donde apareció, considera normal que buscase acomodo en un medio acuático dado su origen. La Fundación Neotrópico, que colabora tanto con los ayuntamientos como con el Cabildo Insular y el Gobierno de Canarias, es la única institución del Archipiélago reconocida por la SSN (Species Survival Network, en traducción libre al español Red de Trabajo de protección de especies amenazadas) como Centro de rescate de especies de fauna amparadas por el CITES.