CASO ARONA 1

Arsenio Zamora niega que la voz de la cinta que lo delata sea suya

El supuesto empresario que hacía de intermediario para el cobro de comisiones, Arsenio Zamora, declaró ayer negando el delito de cohecho que se le imputa. / ANDRÉS GUTIÉRREZ
El supuesto empresario que hacía de intermediario para el cobro de comisiones, Arsenio Zamora, declaró ayer negando el delito de cohecho que se le imputa. / ANDRÉS GUTIÉRREZ

Tras seis intensas jornadas, ayer terminó la declaración de los 13 acusados en el llamado caso Arona 1, en el que se juzga una presunta trama de corrupción urbanística en el Ayuntamiento de Arona desde finales de los noventa hasta 2007. A finales de ese año, el juez Nelson Díaz recibió una grabación que destapaba delitos de prevaricación y cohecho, cometidos por políticos, arquitectos y algún empresario, sumándose así a la denuncia que un año antes interpuso en la Fiscalía Nacional el concejal socialista Paco García Santamaría, sobre licencias y contrataciones ilegales en el Consistorio de Arona. El juicio continuará el lunes con el desfile de casi un centenar de testigos -García Santamaría, precisamente, será el primero-, que podrían ser menos si la Fiscalía y la Acusación Particular, tras el interrogatorio a los acusados, así lo estima oportuno, como dejó de manifiesto ayer la jueza presidenta del tribunal, Lucía Machado.

Una de las figuras fundamentales en este caso es la del veterano empresario Arsenio Zamora Toledo, que ayer aseguró que la voz que aparece en la cinta grabada por José Ramón Ansorena Carrera el 10 de julio de 2002 en el mesón Las Rejas (La Camella) no es la suya. En esa grabación, entregada al juez Nelson Díaz el 18 de diciembre de 2007 en el Juzgado 7 de Arona, Arsenio Zamora es quien pide 45 millones de pesetas al padre del empresario vasco para tramitar la licencia de 206 viviendas en Costa del Silencio, que desde 1999 se le venía negando desde el Ayuntamiento, supuestamente por ser el suelo de uso turístico y no mixto (residencial y turístico), como pretendía el promotor que llegó a Los Cristianos huyendo de ETA, según comentó a sus allegados.

Zamora sí reconoció que al padre del citado José Ramón Ansorena, de idéntico nombre, lo conoció en 1999 en una comida “con mucha gente en Los Cristianos”, y este le comentó que tenía paralizada la licencia para construir unos 200 apartamentos en Costa del Silencio, por lo que fue poco después al Ayuntamiento de Arona y preguntó por la situación del expediente.

Según Arsenio Zamora, acompañó a José Ramón Ansorena en una reunión con el secretario municipal José Ángel Álvarez, y en ese encuentro le comentó que “el expediente estaba archivado y no sabía el motivo” y aunque “el secretario puso algún tipo de reserva, fui yo mismo el que transcribí lo que hacía falta para la modificación del suelo, a petición de Ansorena”, dijo, un escrito que, según el acusador particular, “se hizo en una servilleta en el restaurante donde se produjo la grabación y no en el Ayuntamiento”.

“Después de esa reunión con el secretario, nunca más me reuní con Ansorena ni con su hijo”, manifestó el empresario, que explicó que sus visitas al Ayuntamiento se debían a que había tenido un contencioso administrativo a cuenta de la junta de compensación de la urbanización de la Asomada de los Eres, y que como aquel polígono salió mal, desde el año 2003, en que dejó de trabajar como técnico de Turismo para hoteles Meliá, “vivía del sueldo de mi mujer”.

Arsenio Zamora, que no contestó las preguntas de la acusación particular ni la de las defensas, excepto a su letrada, declaró que nunca estuvo solo y en un restaurante con Ansorena. Santiago Martínez, abogado de la acusación, le preguntó cómo es posible que en la grabación la persona que tiene una voz similar a la suya “hable de un plan parcial como el de la Asomada de los Eres que solo él conoce de forma tan concreta”.

Zamora desmintió que fuera el “recaudador de Eliseo de la Rosa, Roberto de Luis y Félix Sierra”, como llegó a decir el exconcejal Alayón, a cambio de tramitar licencias, y negó que se reuniera con ellos y el empresario Ansorena: “Nunca recibí dinero ni me han ofrecido dinero”, manifestó.

Preguntado por la fiscal porqué no negó en la declaración ante el juez Nelson Díaz de diciembre de 2007 que no era él quien hablaba en la grabación, comentó que “estuve detenido 72 horas, estaba nervioso y sin comer y antes de empezar a declarar el juez me insistía una y otra vez que era yo, que era yo el de la cinta, sin antes leerme los derechos”. La fiscal le recordó que firmó su declaración asistido por el letrado Sergio Batista.

Tras terminar su declaración, Arsenio Zamora recibía la felicitación de su abogada y de buena parte del grupo de gobierno que se sientan como él en el banquillo. Hay que recordar que los acusados pueden mentir en su derecho de defensa, no así los testigos que comenzarán a desfilar desde el lunes y presumiblemente hasta el 9 de mayo en el que este macrojuicio quedará visto para sentencia.

[sws_grey_box box_size=”100″]Acusados y penas

-El exalcalde. Para el exalcalde aronero José Alberto González Reverón (CC), la Fiscalía pide tres años de cárcel, 35 de inhabilitación para desempeñar cargo y empleo público y una multa de 20.000 euros. El mismo cumple actualmente una pena (sentencia del 28 de junio de 2012) de cuatro años y seis meses de inhabilitación para cargo público por un delito continuado de prevaricación y está pendiente de sentencia de otros ocho años de inhabilitación por la causa separada juzgada a principio de diciembre.

-Seis exconcejales. Para Félix Sierra Melo, exedil del PP (1999-2007), la Fiscalía pide en total 6 años de prisión, 11 de inhabilitación especial y 522.500 euros de multa por cohecho y por el delito prohibido a funcionarios. También han declarado como acusados los otros miembros de la Junta de Gobierno 2003-2007: Manuel Barrios (CAN), Daniel Martín (CAN), Juan José Alayón (CC y luego a Los Verdes), José Luis González (CAN) y Alfonso Barroso (CC). Para todos ellos la Fiscalía pide dos años de prisión e inhabilitación especial para empleo o cargo público durante 10 años por un presunto delito continuado de prevaricación urbanística.

-Intermediario. El empresario Arsenio Zamora Toledo está acusado de cohecho, por supuesta extorsión al empresario José Ramón Ansorena, que le grabó una comprometida conversación que él negó ayer.

-Técnicos municipales. Para el exarquitecto jefe de la oficina técnica municipal Eliseo de la Rosa se piden seis años de prisión por cohecho y prevaricación urbanística, además de 20 de inhabilitación y multa de 500.000 euros. Para Roberto de Luis, exaparejador municipal, la fiscal pide ocho años de prisión, 20 de inhabilitación y 3.400.000 euros de multa por prevaricación urbanística y cohecho.

-Arquitectos externos. Para Zenón Rodríguez, Jorge Menéndez y Antonio Luis González Tolosa, se piden cuatro años de cárcel, 10 de inhabilitación profesional y multas, respectivamente, de 1,12 y 10 millones de euros.[/sws_grey_box]

Zenón Rodríguez lograba promociones gracias al aparejador municipal

El arquitecto Zenón Rodríguez insistió que nunca utilizó al aparejador municipal Roberto de Luis para agilizar las licencias de obras en el Ayuntamiento de Arona, a pesar de reconocer que le pagaba el 20% de sus honorarios por obra a la sociedad creada por Roberto de Luis y Víctor Hernández Díaz, un aparejador casado con una sobrina del primero y primo de su mujer. La fiscal, sin embargo, expuso datos de los que se desprende que Roberto de Luis, durante tres años (2000-2003), le recomendó a promotores el estudio de Zenón Rodríguez.

“Le pregunté a De Luis si era compatible su trabajo con su cargo en el Consistorio”

El arquitecto Antonio Luis Pablo González Tolosa, jubilado hace siete años, afirmó en su nerviosa declaración que le preguntó “en más de una ocasión a Roberto de Luis si tenía compatibilidad para poderle contratar trabajos al ser funcionario del Ayuntamiento de Arona”.

La fiscal le recordó a González Tolosa que en su declaración del 22 de diciembre de 2008 había comentado que “los honorarios a la empresa Cram 4, de Roberto de Luis, era por la captación de clientes, no por trabajos”, algo que negó el arquitecto: “Le juro que no lo dije”.

“Cuarenta años de profesión y 3.000 proyectos se hunden con un tema como este”

El prestigioso arquitecto Jorge Menéndez -ha realizado obras como el edificio de Cajasiete en Santa Cruz u Hospiten en el Sur- también insistió en que le había preguntado a Roberto de Luis si podía hacer trabajos fuera de la Corporación y en Arona, y explicó que la colaboración se llevó a cabo en cuatro trabajos en los que el aparejador hizo mediciones y presupuestos, “en donde era uno de los mejores”, comentó, para terminar afirmando que “con Roberto solo hice tres trabajos y 40 años de profesión y 3.000 proyectos realizados se hunden con esto”.