CD TENERIFE

Empate sin historia

Aitor Sanz intenta controlar un balón durante el encuentro de ayer. / SERGIO MÉNDEZ
Aitor Sanz intenta controlar un balón durante el encuentro de ayer. / SERGIO MÉNDEZ

El duelo que jugaron en el Heliodoro el CD Tenerife y el CD Numancia fue el fiel reflejo de la situación de ambos en la clasificación. Están separados por un punto y ayer no quisieron distanciarse. Empataron de manera justa en un encuentro que fue de más a menos. Repitió alineación Martí, con Saúl García en el lateral izquierdo en lugar. Sorprendió el descarte de Cristo González. ¿Recibió un toque de atención el canterano?

A los 10 minutos de partido, el conjunto local ya había acumulado hasta tres ocasiones de gol, con Lozano, Aitor y Omar como autores de las mismas, por lo que era el indiscutible protagonista del partido.

Tras agotarse el primer cuarto de hora, el Numancia logró enfriar el duelo, por lo que las fuerzas se igualaron. En el minuto 16, Suso Santana se llevó la primera cartulina amarilla del choque por protestar. Acción ingenua y totalmente evitable que, además, le prohíbe estar el próximo fin de semana en Tarragona para medirse con su equipo al Nástic.

También fue amonestado Regalón, del Numancia, en el minuto 32, tras sujetar de la camisa a un jugador blanquiazul.

La recta final de la primera parte fue un aliciente para los locales, que intentaron aproximarse algo más al portal defendido por Munir. Lozano probó suerte en el minuto 40 con un disparo ejecutado desde la frontal del área que se marchó desviado.

Sin embargo, fueron los numantinos los que gozaron de la mejor ocasión de gol de todo el partido. A falta de llegar al minuto 45, Dani Hernández salvó los muebles de su equipo. Profundizó por el carril zurdo el Numancia y un centro lo aprovechó Álex Alegría para rematar según le llegó el esférico. El portero hispanovenezolano, sobre la misma raya de gol, intuye la intención del delantero y logra evitar el gol sacando a pasear su pierna izquierda. El público coreó el nombre del meta, el único jugador que lo ha jugado todo esta temporada.

Instantes después, el colegiado pitó el final de una entretenida primera parte.

La segunda parte fue todo lo contrario. El Tenerife empobreció su juego y apenas tuvo llegadas de calidad a la meta de Munir. El Numancia reforzó ciertos puntos estratégicos y logró controlar la situación en muchos momentos del segundo período.

El equilibrio se apoderó del juego, sobre todo en la parcela central. Y el escaso juego que se creaba lo detenían con absoluto acierto las respectivas defensas. Para ganarse un sobresaliente fue la labor que desarrollaron la pareja Carlos Ruiz y Jorge. En especial el canterano, quien protagonizó un partido soberbio.

En el minuto 66 llegó la ocasión más destacada del Tenerife durante este acto. Alberto recibió de Suso para rematar excesivamente cruzado. Ningún blanquiazul pudo meter la pierna para finalmente introducir la pelota en la meta numantina. Martí decidió meter jugadores más móviles y veloces para intentar romper el entramado defensivo del adversario. Así entraron Nano, quien sustituyó a Aitor Sanz en el minuto 67, y Jairo, que relevó a Omar Perdomo en el 78.

Justamente Nano aprovechó un hueco en la zaga visitante, minuto 69, para disparar con fuerza, pero Munir, en dos tiempo, deshizo la ocasión.

Los últimos 20 minutos fueron intensos. Las llegadas eran más o menos continuas, pero ninguno de los dos conjuntos fue capaz de crear una clara ocasión de peligro, por lo que concluyó el encuentro.

El reparto de puntos fue justo. El Tenerife acumula la tercera semana consecutiva sumando y está a siete puntos de la zona de descenso.