Segunda División B

El via crucis del Mensajero a domicilio no tiene fin

Una acción de un encuentro del equipo palmero / Iván Rodríguez
Una acción de un encuentro del equipo palmero / Iván Rodríguez

El Mensajero cayó en Zubieta ante la Real Sociedad B, en un partido que los locales encarrilaron con un penalti más que dudoso por falta de Víctor Marco sobre Babic. Ya en la segunda mitad, otra pena máxima más que discutida por supuestas manos de Dani Hernández, sirvió para poner el 2-0 en el tanteador.

Rubén Sánchez fue el primer mensajerista en intentarlo, logrando forzar un córner. No tardó en replicar el Sanse, que dio el primer aviso en una jugada embarullada. Primero minutos muy abiertos, sin un dominador claro.

Tras un saque de esquina el colegiado señalaba penalti por supuesto derribo a Babic. Fue un simple forcejeo con Víctor Marco. Pena máxima muy discutida por los canarios y que Eneko Capilla transformaba con suspense, pues el cuero daba en el larguero antes de colarse en la meta de Ione. Previamente a la acción de penalti, dio la sensación de que el balón había salido del terreno de juego.

Tenía que reaccionar un Mensajero que bien posicionado no terminaba de llegar al área rival. Los palmeros se hicieron con la bola y empezaron a mirar el marco contario. Mejoró el fútbol de los rojinegros, ante un rival que debió dar un paso atrás. En una contra, Eneko Capilla gozaría de una gran ocasión para el 2-0. Y seguidamente Nacho Rodríguez casi introduce el esférico en su propia puerta en el intento de despeje.

Muy mal empezó la segunda mitad para el Mensajero, pues Dani Hernández veía la roja en una acción sancionada con penalti por manos y que trasformaría Babic. El balón pareció dar en el cuerpo de Dani Hernández, aunque el colegiado no dudó ni un segundo.
Luca Sangalli hacía el 3-0 mediada la segunda mitad con un gran tiro que se coló por la escuadra.

La Real Sociedad B jugaba muy cómoda, ante un rival que ya no le podía hacer daño. Aunque aún quedaban muchos minutos para el final, el encuentro estaba totalmente resuelto. Álvaro Odriozola firmaba el cuarto ya al borde del final.

Mucho castigo para un Mensajero que se fue enfadado con la actuación arbitral, lo mismo que ante el Real Madrid Castilla.