al golpito

Nuevos vinos en Europa

Una vez más, los caldos de nuestra tierra siguen siendo orgullo y admiración en Europa, especialmente los vinos que genera la bodega tinerfeña Balcón de La Laguna, siendo en esta nueva oportunidad la única bodega canaria galardonada en el prestigioso concurso monovinos a nivel nacional de monovarietales, recientemente celebrada en la capital de España. Se trata de un certamen, donde se sometieron a la cata de veinte jurados profesionales, más de 210 vinos de 24 varietales de todo el país, y donde se pone en valor la diversidad y riqueza del viñedo español, destacando aquellas uvas singulares y de gran potencialidad diferenciada que atesora nuestro país. La Bodega Balcón de La Laguna, bajo la denominación de origen Tacoronte de Acentejo, lleva acumulados numerosos premios y reconocimientos nacionales e internacionales con las últimas cosechas 2013 y 2014 por su excelente calidad e innovación en la elaboración de sus caldos. En la cosecha del pasado año 2015 fue galardonada, consiguiendo sus dos primeras medallas de ésta añada; siendo premiados el Ainhoa dulce moscatel con la Gran Medalla de Oro y clasificado entre los tres mejores vinos del concurso, y HC tinto variedad castellana fermentado en barrica con Medalla de Oro. Son éstos los únicos caldos canarios distinguidos en la citada edición del mencionado concurso, cuyo prestigio crece exponencialmente cada año. Sin duda, bodega Balcón de La Laguna lleva obteniendo numerosos premios en concursos internacionales de vinos de montaña celebrado en Italia y que organiza el Centro de Investigación, Estudios, Salvaguardia, Coordinación y Valorización de la Viticultura de Montaña (Cervim). Ni que decir tienen, que con tan solo dos años adscrita a la denominación de origen Tacoronte-Acentejo, la bodega propiedad del enólogo Manuel Capote y el oftalmólogo Ricardo Herrera consiguió lo que otras no han podido en más de 20 años de recorrido: una gran medalla de oro y mejor vino del concurso. Lo hizo con el Ainhoa dulce de la cosecha de 2014, un caldo que ya había logrado a comienzos de año otra medalla de oro en un concurso celebrado en Lyon. Sin embargo, no fue el único premio conseguido, a este se unieron otros cuatro premios: medalla de oro para un Capote tinto; medalla de oro para un HC blanco de uva tinta; medalla de plata para un HC castellana en barrica tinto; y medalla de plata para un Ainhoa blanco seco.

Para el enólogo, Manuel Capote: “el secreto de estos excelentes caldos es la ilusión y el amor que le ponemos todo el equipo que trabajamos en este ilusionante proyecto”. Por todo ello, Capote y su equipo de trabajo se han convertido de alguna manera en los “embajadores de los vinos de nuestra tierra, junto con otras importantes bodegas del Archipiélago canario. Manuel Capote Herrera comenzó a trabajar a los 14 años, compaginándolo con los estudios. Su afición a la viticultura le viene por la que hoy es su mujer, Laura. Cuenta Capote que sus suegros hacían vino, “pero se tiraba mucho. Eso motivó esforzarme y especializarme en los caldos”. El enólogo y bodeguero no oculta su alegría al reconocer que “estos dos premios internacionales son el esfuerzo e ilusión de un trabajo de dos años, donde he tenido la colaboración de mi socio y amigo, Ricardo Herrera. También de mi familia y amigos: Laura Ledesma (esposa), Ainhoa (hija), Ana González, Fernando Clavijo, Gabriel Pérez, Javier Plata y Francisco Barreto”. Del mismo modo, resalta que “es la primera vez en la historia de Canarias que una bodega, en el primer año de su creación, saca cinco tipos de vinos diferentes y en el segundo, ocho”. La humildad y humanidad de Capote supera cualquier premio material de la vida, pues no en vano Balcón de La Laguna es además, un proyecto solidario, ya que dona parte de sus beneficios industriales a la ONG Proyde-Colegio La Salle. Una idea, según señala Capote, que surgió de su hija Ainhoa. “Nos sentimos dichosos de ayudar a niños del tercer mundo”, confiesa. En lo que respecta a la calidad de los vinos en Canarias, Capote Herrera no duda en comentar que “cada vez son mejores, ya que hay excelentes enólogos y un control más sanitario”.