Ganar para mantener viva la ilusión de hacer cosas importantes esta temporada. La consigna es clara para el Iberostar Tenerife para el encuentro que lo enfrenta hoy, a partir de las 20.00 horas, a un MoraBanc Andorra que persigue lo mismo que los tinerfeños. Los vaivenes dados por los aurinegros hasta el momento deben acabar de una vez por todas y, ¿por qué no en el Principado?
No se puede negar que el CB Canarias está huyendo de los paños calientes. Los jugadores y el cuerpo técnico han admitido que conseguir el triunfo hoy es algo necesario, que la presión les pesa y Vidorreta ha reconocido que necesitan ser un equipo equilibrado, capaz de competir hasta el final y que jugar fuera de casa puede servir para “despejar la mente”.
Y no le falta razón al Iberostar Tenerife para ser optimista porque, puestos a elegir, los aurinegros, posiblemente, optarían por tratar de buscar una reacción lejos de la Isla antes que en el Santiago Martín. Ha sido a domicilio cuando los tinerfeños han mostrado su mejor cara, han sido más competitivos y capaces de hacer frente a cualquier equipo.
Los números no mienten; a pesar de haber sido ante Valencia, Barcelona y Unicaja, tres derrotas en los últimos cuatro duelos disputados como local son muchos para cualquier conjunto. Más aún para uno que ansía enganchar una buena racha de juego y resultados que sigue resistiéndose.
Pero Andorra, como la mayoría de conjuntos de la Liga Endesa, es mejor como local que como visitante. En el Govern de Andorra los de Joan Peñarroya son capaces de competir con cualquiera y, además, llegan de haber hecho un gran partido en el Palau, ante el FC Barcelona, al que solo le perdieron la cara en los últimos minutos.
Con solo dos victorias más que los tinerfeños, los andorranos saben que el rival que les visita hoy lo hace con la presión añadida, por si ya de por sí no tuviera mucha, de saber que ganar hoy supone mirar hacia arriba pero perder puede condenar a los de Txus Vidorreta a vivir un resto de curso pendiente de la zona baja de la clasificación o, con algo de suerte, la templada, que poco engancha a una afición que tiene casi que ser empujada a acudir al Santiago Martín.
No es novedad, pero no deja de preocupar que Saúl Blanco, una semana más, no esté disponible. En teoría, el alero asturiano debería regresar este mes que llega a su ecuador, pero el entrenador del Iberostar Tenerife, quizás algo resignado, admitió en la rueda de prensa previa que “poco” puede decir nuevo acerca del estado de un jugador desesperado por volver a pisar una pista de baloncesto para competir.
El Andorra no solo no tiene ninguna baja, sino que desde su directiva se ha trabajado para contar con un sexto hombre. Bajo el lema Vamos todos a la Bombonera, el club ha puesto en marcha una campaña para que los de Joan Peñarroya se sientan más arropados que nunca, algo con lo que siempre han sabido lidiar los de Txus Vidorreta, conocedores de que estos partidos, en los que o te enganchas o te dejas ir, se presentan muy pocos a lo largo del año, por lo que no se puede fallar.