«Compartimos objetivo de la promoción de la calidad en el empleo y la reducción de los daños que sufren trabajadores en sus puestos de trabajo, pues somos conscientes de que los descensos en las cifras de accidentalidad repercute de forma clara en una mayor competitividad de nuestras empresas», resaltó
La accidentalidad laboral registrada durante el pasado mes de mayo disminuyó un 25,65 por ciento, según los datos de la Dirección General de Trabajo, ya que durante el quinto mes del año se notificaron un total de 1.678 accidentes con baja en jornada de trabajo, 579 menos que en mayo de 2011
De estos fallecimientos, un total de 120 se produjeron en jornada de trabajo, un 9,1% menos que hasta marzo de 2011, mientras que los 20 restantes fueron «in itínere» (los que se producen en el trayecto de casa al trabajo y viceversa), con un descenso del 51,2%