La Orotava perdió su memoria en la madrugada del 2 de junio de 1841
Su varias veces centenaria historia quedó marcada esa madrugada por un incendio en el Ayuntamiento, sito en el número 1 de la calle Colegio, que hizo que las llamas destruyeran la documentación que hasta ese momento existía en el Archivo. Solo unos pocos documentos se salvaron del fuego