divulgación El deseo del estratega

El deseo del estratega

En Varsovia, Napoleón se prendó intensamente de María Walewska, una mujer de la que decían era el rostro más hermoso de las orillas del Vístula, el río caudaloso y empecinado que baña la capital y a veces desborda su furia contenida, por llevar años observando tanto y tan continuo sufrimiento