El precio de informarse
Las personas que se han tomado demasiado tiempo para conocerse a sí mismas -y están convencidas de quiénes son y cuáles son sus principios- hacen pocas incursiones en la realidad
Las personas que se han tomado demasiado tiempo para conocerse a sí mismas -y están convencidas de quiénes son y cuáles son sus principios- hacen pocas incursiones en la realidad
Cuatro publicaciones nuevas, cerca de cinco mil periodistas contratados a tiempo completo y el convencimiento de que solo los mejores sobrevivirán
Su currículo impresiona. El investigador principal de Economía y Comercio Internacional del Real Instituto Elcano y profesor de Análisis Económico de la Universidad Autónoma de Madrid se ha construido una trayectoria académica y profesional de esas que dan vértigo
Es difícil vivir con unas cuantas certezas, pero es más complicado hacerlo sin ninguna
Más de 25.000 personas habían firmado ayer una de las peticiones recogidas en la plataforma change.org para cambiar la ley electoral canaria
Poco o nada se ha dicho, sin embargo, de todos los programas del resto de formaciones-garrapata, esos partidos que no saben qué es estar en la oposición, que llevan décadas y décadas reproduciendo los mismos programas sin que nadie los fiscalice
En campaña electoral casi todo está permitido. Los políticos pueden pronunciar todas las promesas que estimen oportunas
Las pifias anecdóticas pueden arrancarnos una risa, faltaría más, pero la calidad del periodismo no se mide en lapsus, memorísticos o técnicos, que se pueden cometer cuando un periodista lleva trabajando doce horas o solo dos
Si uno ve lo que la gente favorece en los medios, las listas de lo más leído, se mata, se dedica a la noble profesión de la peluquería, la carnicería o los asaltos a bancos, pero deja esta tontería. Yo creo cada vez más que hay que hacer periodismo contra la gente”
Iba a ser la historia de James Earl Ray, el hombre que mató a Martin Luther King y que en su huida acabó en Lisboa con la esperanza de subirse a algún barco que lo llevara hasta África
Es fácil ponerse en la piel de las autoridades italianas. Piden ayuda, igual que hicieron los políticos canarios cuando en 2006 llegaron al Archipiélago más de 25.000 personas subidas a cayucos y pateras
Murió el escritor, pero también el hombre que se empeñó en reescribir la historia colonialista que sufrió América Latina y que hasta el último de sus días defendió los regímenes de Venezuela, Bolivia o Cuba
Dijo que eran más de 150 muertos y que la masacre había ocurrido en Nigeria
No hay estudios que determinen cuántos políticos caben por metro cuadrado cuando hay que cortar una cinta roja o destapar una placa que renombra una calle sin necesidad de darse empujones
Casi cinco millones de parados solo en España, muchos mayores de 45 años y con escasas posibilidades de reciclarse
Lo viejo ya no sirve; ni siquiera lo maduro. La imagen de los políticos está tan deteriorada que hace tiempo que la experiencia dejó de ser un grado y se convirtió en una carga
Ese gamberrismo consentido, que no hay que confundir con el arte urbano, es obra de unos pocos. No se soluciona con cámaras, pero sí con más medios y sanciones
Los que nos dedicamos a esta profesión no dejamos de preguntarnos qué busca nuestro lector, cómo se salvarán los periódicos, en qué momento las ediciones digitales serán rentables. La respuesta, sin embargo, puede que no sea tan complicada
Durante las últimas semanas las redes sociales y, supongo, las barras plateadas de algunos bares se han llenado de críticos con un vasto conocimiento sobre literatura erótica
Antonio Muñoz Molina escribió en 2011 ‘Todo lo que era sólido’, un brillante ensayo sobre los desbarajustes cívicos de España, un país que eludió infinidad de controles con la excusa de crecer y equiparse a una Europa a la que había llegado tarde