Conocí a Cubillo una tarde de agosto de 2011. Hablamos durante tres horas en su casa de Santa Cruz. La conversación fue igual que su vida. No dejó de girar en torno a esa idea inamovible que tuvo de su tiempo y de su inventada patria. Es increíble, pero nunca dudó
Me encantan los cuentos, pero a veces prefiero que no sean tan surrealistas. Quiero una administración eficiente, creo en los servicios públicos de calidad y deseo que miles de chicos encuentren su futuro en el autoempleo. Pero ya está bien de identificar víctimas y culpables
Cuando se vino de Venezuela era un niño. Probablemente fue la primera gran aventura de su vida, pero fue solo el comienzo de décadas y décadas de aventurero servicio público
Desde el Twitter hasta la caja de los cereales, no podemos evitarlo: estamos leyendo desde que nos levantamos hasta que nos acostamos. El problema no es que ya no leamos tanto como antes, es que no leemos como antes
La crisis está perfectamente monitorizada. Todos -a excepción de la ministra Fátima Báñez- intuimos cómo se comportará la tormenta y qué tragedias dejarán las escorrentías que se produzcan en las zonas donde antes hubo fuego
La crisis tiene muchas formas de arrebatarte el futuro. Puede expulsarte a otro país, dejarte sin empleo o condenarte a distintas formas de precariedad laboral. Yo, lo menos que puedo hacer, es contar su historia y luchar para que se vean los rostros de esta crisis y no solo los datos
ace algunos años, siempre que Ismael Serrano pasaba por Sevilla, compartían escenario. Ya era tradición. En medio del concierto, el cantautor madrileño hacía un descanso en su recital, presentaba a su amigo y abandonaba discretamente el protagonismo para que Alfonso del Valle tuviera su momento
En los años 40 fue todo un descubrimiento. La economía del desarrollo nació y parecía tener la fórmula perfecta para erradicar la miseria que corroía muchos países
Hubo un tiempo en el que se puso fecha exacta para el final de la crisis. El único problema fue que la realidad no estuvo de acuerdo con el titular. No nos importó, persistimos en el empeño. Nos afanamos en publicar todos los augurios que hallamos porque creímos que así estábamos desvelando una verdad escondida
Hace poco lo recordó José Luis Sampedro, pero lo cierto es que ocurrió hace bastante tiempo. Era la época de la República, en España había mucha hambre y el capataz de un cacique se dedicaba a ir de puerta en puerta comprando votos
Decía Manuel Jabois en una entrevista que el primer deber del columnista es pasar de los lectores. “Creo que de los lectores hay que pasar y dedicarse uno a estar satisfecho consigo mismo y su trabajo (…). Cuando firmas una columna lo normal es que algunos lectores te quieran separar las patitas para mirarte el sexo y ver de dónde vienes»
Las universidades canarias tendrán aspectos que mejorar. Lo dicen los ránkings. Eso me preocupa, pero me preocupa más saber si serán capaces de cambiar la mentalidad