VICENTE PÉREZ | Arona
El problema del proyecto de la futura playa de Los Tarajales (entre el hotel Arona y la playa histórica) no es la burocracia en la Dirección General de Costas, sino la dificultad de diseñar la regeneración de esta futura zona de baño sin agravar aún más el estancamiento del agua en la playa de Los Cristianos. Así lo han manifestado fuentes de la Asociación de Vecinos de este núcleo de Arona.
Como ya hiciera en su día, incluso mediante ruedas de prensa, este colectivo no ha variado un ápice su postura contraria a un proyecto que prevé dos diques perpendiculares, uno de 123 metros y otro de 157, que reducirían la bocana de la bahía y generarían calmas hidrodinámicas, comprometiendo la circulación y renovación de las aguas.
Una obra así provocaría, según estos vecinos, un incremento considerable en los valores de toxicidad, producidos por la falta de renovación del agua en la playa histórica de Los Cristianos.
Recuerdan las fuentes de este colectivo ciudadano que en su momento se hallaron en la bahía algas marinas con afinidades por aguas muy saladas y muy calientes, llegando a sobrepasar los 25 grados centígrados y produciendo una gran evaporación, lo que disparó los valores de salinidad y el descontrol en el crecimiento de este tipo de algas, fenómeno debido a la escasa renovación de las aguas.
La arena de machaqueo que se pretende verter en la zona preocupa también a esta asociación, por los perjuicios que ocasionaría al entorno y no ser tampoco agradable para los bañistas.
Así las cosas, desde esta agrupación ciudadana se sigue defendiendo un concurso de ideas para elegir un único proyecto para toda la bahía, con un actuación integral, que suponga la rehabilitación de la playa histórica, conservando la concha natural de este litoral, y con una evaluación detallada de su impacto medioambiental.
Esta versión vecinal contrasta con la del alcalde, José Alberto González Reverón, quien, en declaraciones a este diario, se ha quejado de la lentitud de Costas en tramitar el proyecto, con diez años ya de curso burocrático.
El documento se encuentra remitido ahora al Cabildo y al Gobierno canario para recabar sendos informes, determinantes para que el Ministerio de Medio Ambiente pueda emitir una declaración de impacto favorable, según detalló Reverón, tras una reciente reunión con la Dermarcación de Costas al respecto.
El alcalde ha criticado que el Gobierno central dé prioridad a playas en zonas no turísticas y no a ésta, enclavada en un destino tan importante para el turismo.