El economista jefe de La Caixa, Jordi Gual, expone que la coexistencia entre pensiones públicas y privadas tiene “un sentido económico claro” para afrontar el envejecimiento de la población y los problemas de diseño de los sistemas de reparto vigentes hasta la llegada de la crisis en 2007
Casi todas las entidades han preparado ya su anzuelo para hacerse con el dinero de los ahorradores, que este año se decantan por los sistemas garantizados
La compañía postal pública, que actualmente suma 58.000 empleados, de los que 22.000 son funcionarios, también suspenderá este año las aportaciones al plan de pensiones