por qué no me callo > Carmelo Rivero

Antes y después - Por Carmelo Rivero

El viernes, volví a ver una cola de gente por fuera del Espacio Cultural de CajaCanarias, como en tiempos de la Obra Social con Martín y Pascual Arroyo Gajate. La ciudad rebosaba de bellas artes y coral (de voces blancas). La serpiente humana, esta vez, acudía a escuchar al Gran Wyoming, J. J. Millás y José Chamizo

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El cuñado infiel - Por Carmelo Rivero

Los amores prohibidos de Ramón Serrano Súñer, el cuñadísimo de Franco y poderoso ministro de ojos azules, con la bella marquesa de Llanzol, que acaba de novelar Nieves Herrero, desempolvan el pasaje que minó la carrera política del longevo falangista filonazi

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Tres artistas - Por Carmelo Rivero

El escultor y pintor José de Guimaraes había perdido toda esperanza de que fuera inaugurada oficialmente su Luta de serpientes en la avenida de Madrid de Santa Cruz, pero de esos letargos de la burocracia y la desidia institucional ha hecho una máxima: “Un artista sin paciencia no es nada”

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Las manos de Víctor Jara - Por Carmelo Rivero

Los cantautores tinerfeños peinaban canas, incólumes, el viernes en el Espacio Guimerá, junto a Rubén Díaz, el músico y poeta nexo de su generación. El diálogo concierto se dejó arrastrar por una nostalgia volitiva de los que nunca fueron pusilánimes

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Sirios y coreanos - Por Carmelo Rivero

Si las guerras de escarmiento impartieran justicia, habría que bombardear, además de Siria, a Corea del Norte, donde el sátrapa con cara de niño consentido ordenó vaciar el cargador contra un plantel de músicos por haber grabado un vídeo de alto contenido erótico y cantar en sus filas una exnovia del enano barrigón con cuello mao

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Arte en Venecia - Por Carmelo Rivero

Venecia mide el pulso del arte mundial. La bienal, de un trago, está descompensada en compartimentos estancos, como la reprende poéticamente el chileno Alfredo Jaar, sumergiendo y reflotando venecianamente los pabellones en la laguna común de los canales de su maqueta

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La visa - Por Carmelo Rivero

La visa es mala señal. Europa se reserva el derecho de admisión de quienes tiene etiquetados como una amenaza de narcotráfico/inmigración irregular y otras hierbas. Ese baldón cuesta quitárselo de encima, así se viren las tornas y el paria se vista de esmoquin

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Francisco Sánchez - Por Carmelo Rivero

En la Declaración Universal de los Derechos Humanos de las Generaciones Futuras (La Laguna, febrero del 94) el comandante Cousteau lideraba un equipo de expertos de la Unesco que aspiraba a limitar el maltrato del planeta para garantizar la vida sobre el mismo

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G-8 - Por Carmelo Rivero

El karma de las regiones ultraperiféricas son sus lastres endógenos: es sabido que propenden a tasas desmesuradas de paro, bolsas de miseria, empleo de baja cualificación, menores salarios medios y escaso número de grandes empresas (en régimen de cuasi monopolio)

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A cántaros - Por Carmelo Rivero

Como una matraquilla me repito que se necesitan canciones para hacer, como en los 60, 70 y 80, cantar a la calle. No es posible decir las cosas de mejor modo que con una canción

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El canon del Tío Sam - Por Carmelo Rivero

Cuando algo se pone de moda, suceden cosas en cadena. Abdican dos monarcas y un emir, y Philip Roth y Alice Munro. La primavera árabe acuñó la toma de las plazas como espoleta de la ira de los jóvenes, y en el norte de África, el ágora, como en la Grecia antigua, fue el altavoz de los que tenían algo que decir

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Pelé - Por Carmelo Rivero

Cuando conocí a Pelé, en 1981, hacía poco más de tres años que se había retirado, con más de mil goles y más de mil partidos a cuestas, y la ONU lo había declarado Ciudadano del Mundo