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El Ayuntamiento ahorrará un millón de euros al año en salarios

   

El alcalde, José Manuel Bermúdez, ha coincidido con sus socios de gobierno en hacer una gestión racional. | DA

NANA GARCÍA | SANTA CRUZ DE TENERIFE

La nueva Corporación de Santa Cruz de Tenerife, con José Manuel Bermúdez en la Alcaldía, se ha propuesto aportar cordura a la estructura y funciones municipales y para ello adoptará una serie de medidas para racionalizar el uso de los recursos administrativos y reducir a la mitad los gastos destinados a personal. Así, con el objeto de ahorrar un millón de euros anuales en sueldos, se hará una reducción de un 50% en los cargos de confianza, así como del personal directivo.

De esta manera, en relación con los puestos reservados a personal eventual, permanecerán únicamente aquellos estrictamente necesarios para que los concejales puedan desarrollar su labor. Es decir, se eliminarán los asesores, incluido el del alcalde, y se suprimirán las direcciones generales y otras unidades superiores recogidas en el Reglamento Orgánico del Gobierno y de la Administración del Ayuntamiento capitalino. Sóolo se contará con secretariado y personal técnico.

Es preciso recordar que el anterior alcalde, Miguel Zerolo Aguilar, había llevado a cabo en enero de este año una reestructuración de los órganos directivos y unidades administrativas, mediante la que se redujeron, suprimieron y modificaron ciertas secciones municipales. Sin embargo, según fuentes del Consistorio, la nueva Corporación está barajando una nueva reestructuración de áreas que deberá ser definida y aprobada en el primer pleno del mandato. Éste está previsto que se celebre en el plazo de un mes, tras la toma de posesión, es decir, antes del 10 de julio.

Conscientes de la precaria situación de las arcas municipales, tanto el candidato de Coalición Canaria, José Manuel Bermúdez, como el socialista Julio Pérez habían incluido en sus programas electorales conceptos como la austeridad y el control del gasto en la administración local. Así, mientras el nacionalista hacía referencia a “la simplificación administrativa como una necesidad”, el proyecto político de Pérez hablaba de “una gestión austera de los recursos públicos”, que pasaba por la reducción de “altos cargos y personal de confianza”.

Esta coincidencia deberá resolver también las retribuciones de los concejales que se aprobarán en pleno.