La playa que sigue sin respuestas

La playa de Las Teresitas hace ya algunos años, que perdió la bandera azul. / FRAN PALLERO

JESSICA MORENO | SANTA CRUZ DE TENERIFE

A pesar de que Santa Cruz de Tenerife es una ciudad vinculada histórica y geográficamente al mar, cada vez los ciudadanos de la capital de la Isla carecen de más espacios donde poder disfrutar de la costa. Atrás quedaron los años en los que los vecinos se podían bañar en la zona de El Cabo, en El Toscal, María Jiménez, en Valleseco o en San Andrés, puesto que estos accesos o han desaparecido o muchos se encuentran en pésimas condiciones.

En estos momentos, los chicharreros solo disponen del Parque Marítimo para acceder al mar. Esta instalación lleva una semana abierta después de muchos meses sin prestar servicio y, eso sí, los ciudadanos tienen que pagar una entrada por acceder a estos servicios. Además, se encuentra la playa de Valleseco, aunque no está en las mejores condiciones y por la que sus residentes llevan unos veinte años esperando a que se ejecute un proyecto de rehabilitación. Otra posibilidad es la playa de Las Gaviotas, pero el acceso se hace imposible debido a que la carretera se encuentra cortada por desprendimientos en la zona.

La última de las opciones es la playa de Las Teresitas, pero este espacio costero no se encuentra ahora mismo en su mejor momento. De hecho, hace ya algunos años, desde que perdió la bandera azul -distinción que pone de relieve la calidad de las playas de España- este espacio ha ido en declive y aún está esperando muchas respuestas. Problemas en la calidad del agua, baches en los aparcamientos, colas interminables para acceder, baños antiguos y obras a medio acabar son algunas de las deficiencias con las que tienen que convivir a diario los usuarios de la playa. Aunque estos problemas no son nuevos, sino que llevan bastante tiempo esperando una solución.

Una de las cuestiones en el aire es el futuro del edificio de aparcamientos. / FRAN PALLERO

Actuación municipal

A pesar de que en los últimos tiempos se ha llevado alguna actuación -bastante limitada- por parte del Ayuntamiento capitalino, como la limpieza de la arena en el comienzo de la temporada estival, el puntual refuerzo policial o el parcheo de algunos jardines, lo cierto es que con estas actuaciones no es suficiente para volver a poner en valor a la playa de Las Teresitas.

Precisamente, esta actuación ha estado presente en la mayoría de los programas electorales de los partidos que aspiraban a entrar en el Consistorio capitalino y ahora será el equipo que recientemente ha tomado posesión quienes se encargarán de cumplir sus promesas y solucionar, no solo la mejora física sino, también, los servicios de esta zona del litoral.

Coalición Canaria y Partido Socialista, quienes han firmado un pacto de gobierno para estos cuatro años en el Ayuntamiento, serán los encargados de solucionar los problemas legales de la playa -entre los que se encuentra el derribo del edificio de aparcamientos, conocido como mamotreto-, y la adecuación de sus servicios.

La playa de Las Teresitas no es solo un espacio donde disfrutar del mar, sino que su utilización va más allá. Cumple, además, una función social como espacio para jóvenes y mayores para practicar deporte y es un lugar de ocio y reunión los fines de semana para toda la familia. Todo ello pone de manifiesto, más aún si cabe, la urgencia de tomar una solución al respecto.

Entre las deficiencias y problemas que se han planteado a lo largo de estos últimos años se encuentra la paralización de las obras del proyecto previsto en la playa, entre los que se incluye el del mamotreto. Este edificio de aparcamientos -a medio hacer- se encuentra a la entrada de Las Teresitas, justo al lado del antiguo cementerio. Además, el futuro de este inmueble aún está por ver ya que hay una sentencia que marca el derribo del mamotreto. Otro asunto que está aún en el aire es el futuro de los kioskos, y si estos podrán seguir realizando su trabajo.

Entre las deficiencias de estos años se encuentra las quejas por falta de limpieza, tanto en la arena como en el agua. De hecho, en varias ocasiones se ha detectado una sustancia blanca que ha provocado el cierre al baño en algunos tramos de la playa. Unos baños viejos, asfalto agrietado en la zona de los aparcamientos, alcantarillas levantadas, acumulación de aguas residuales, jardineras rotas, falta de luz por la noche o la promoción exterior de la la playa para atraer al turismo son algunas de las carencias que usuarios y trabajadores ponen de manifiesto y reclaman.

Stefan, uno de los camareros de un chiringuito, que lleva cuatro años en la playa, pide más atención para Las Teresitas “porque todos los turistas se van al Norte o al Sur y no viene aquí. El Ayuntamiento debería promocionar más esta zona”. Otra de sus quejas es la del estado de los baños, ya que aunque asegura que se limpian a diario “deberían cambiarlos por unos nuevos”. Esta misma idea es defendida por Conchi, una usuaria de la playa, quien además se queja de la falta de aparcamientos los fines de semana.

Problemas en la calidad del agua y baches en los aparcamientos son algunos de los problemas que esperan solución. / FRAN PALLERO

Salvador, otro de los vecinos, afirma que “aunque en niveles generales está bien, la única pega es la falta de vigilancia policial fuera de la época de verano, lo que hace que la gente entre los perros a la playa”.

Aunque muchos usuarios defienden el estado de Las Teresitas, la visión de los trabajadores es algo más critica. Así lo refleja Martín, uno de los hamaqueros. “Muchas veces soy yo quien tiene que retirar la basura de mi zona porque hace falta que pasen más a menudo a barrer”, señala. Asimismo, propone colocar puntos de luz por la noche, cambiar los cubos de basura y aumentar el número de baños.

Aunque muchas son las peticiones y propuestas de usuarios y empleados, finalmente la última palabra la tendrán los políticos que serán los responsables de mejorar Las Teresitas.