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EL HIERRO > crisis volcánica

En La Restinga solo quedan geólogos y guardias civiles

   

La Guardia Civil instaló ayer un puesto de control en la carretera de acceso a La Restinga y a la zona de El Julan por la costa. / FRAN PALLERO

VICENTE PÉREZ (ENVIADO ESPECIAL) | El Pinar

La Restinga se ha convertido en un pueblo fantasma. Sólo los geólogos que estudian la evolución del fenómeno volcánico y los guardias civiles que vigilan los accesos pueden pasar. La carretera de El Pinar a este barrio costero sigue cerrada tras la evacuación de sus 500 habitantes el martes. Ayer se permitió a los vecinos regresar por unos minutos para recoger documentación, medicamentos y otras pertenencias que se dejaron olvidados durante su desalojo del martes, cuando el Instituto Geográfico Nacional (IGN) recomendó esta medida al acercarse los movimientos del magma a la costa y haber peligro de una erupción cerca de este pueblo.

Un grupo de guardias civiles se encarga de controlar los accesos al pueblo y de vigilarlo. Para entrar es necesario acreditar que se es residentes en esta zona, enseñando el DNI, y sólo en grupos de cinco coches como máximo. Fue el caso de Francisca, más conocida como doña Pancha, una mujer de más de 80 años que ayer no se creía aún lo que estaba pasando. Hace dos semanas apareció en este diario y se mostraba tranquila, pero ayer protagonizó la portada del periódico llorando mientras era evacuada, y se mostraba muy asustada y apesadumbrada a su regreso de La Restinga, acompañada de la concejal de Turismo y Transporte, Magaly González.

Francisca ha pasado la noche en la Residencia Escolar de Valverde, hasta donde acudieron el martes unos 90 vecinos, muchos de ellos turistas. Otros 500 continúan realojados en casas de El Pinar, bien de su propiedad o de familiares y amigos.

El concejal de Seguridad y Emergencias, Jesús Pérez, confirmó a este diario, tras visitar La Restinga, que en este lugar se siente “como un temblor constante, que se nota si uno se fija en una botella cómo oscila el agua”. Reconoció que ayer se “flexibilizó” el acceso a los vecinos evacuados “porque hubo gente que no ha podido llevarse algunas pertenencias y medicinas”.

El edil, que coordina el operativo municipal para esta emergencia, informó de que han llegado a la isla 20 guardias civiles procedentes de Tenerife para reforzar la vigilancia y el control de acceso a El Pinar mientras dure el desalojo. En esta operación de emergencia está colaborando un grupo de voluntarios.

Pérez confesó que él, como todos los vecinos, vive “con la incertidumbre de cómo evolucionará este fenómeno. La evacuación ha sido en un momento inesperado, pero no nos ha cogido por sorpresa porque estaba dentro de lo previsto”, señaló el concejal, quien destacó la colaboración mostrada por las personas evacuadas y la solidaridad del resto de habitantes.

Sólo una anciana alemana se negó inicialmente a abandonar su casa, aunque luego se logró convencerla. Los barcos atracados en el muelle de La Restinga también iban a ser trasladados ayer al de La Estaca, según informó el presidente Paulino Rivero en su visita a El Pinar.

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Desconocen cuándo podrán volver a sus casas

El pueblo costero seguirá evacuado hasta que los científicos determinen que ha pasado el peligro para esta población, según confirmó ayer el presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, durante su visita a El Pinar, acompañado del presidente del Cabildo, Alpidio Armas, y del alcalde Juan Miguel Padrón. Rivero departió con algunos vecinos evacuados, como ocurrió en el bar El Mentidero, donde le transmitieron su preocupación por la situación de emergencia que vive El Pinar. “Abandonar la casa de uno es una situación complicada para cualquier persona, pero yo me quedo con lo que me dijo un vecino: que se quedó con la imagen de un pueblo abandonado al ir a su casa”.

Rivero declaró que los vecinos volverán a sus hogares cuando los geólogos determinen que ha pasado el peligro. Entretanto, la directora del Instituto Geográfico Nacional en Canarias, María José Blanco, reconoció que no sabe cuándo podrá tomarse esta medida.

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