Mariano Rajoy > Luis Ortega

Mientras digerimos el relevo y las designaciones de Rajoy Brey, que sorprendieron hasta a sus íntimos, un correo del trotaméricas Alexis Varela nos recuerda el sentido de estas fechas y nos desea “un feliz año mariano”. Alvaro Cunqueiro, entre los narradores con más magia y fuste del siglo XX, afirmó que “la ambigüedad es el estado previsible del gallego”. El antaño registrador de Santa Pola lo probó ahora; curtido en todos los niveles de la administración se rodeó de una guardia pretoriana, con Soraya Sáenz de Santamaría, como vicepresidenta, ministra de la presidencia y portavoz; Ana Pastor Julián, en Fomento; Jorge Fernández en Interior, en óptimas condiciones para acabar con la furia etarra; José Manuel García Margallo, eurodiputado y enlace con los populares europeos, en Asuntos Exteriores y Cooperación; y el vasco Pedro Morenés, que fue secretario de estado con Eduardo Serra -que gobernó con el PSOE y luego con el PP- en la cartera de Defensa. Con Ruiz Gallardón, al que solo le faltó pedir el salto al ruedo nacional en arameo, en Justicia, satisfizo al inclito Aznar, cuya esposa Ana Botella hereda, nada más y nada menos, que la alcaldía de Madrid; Ana Mato, del Clan de Valladolid, divorciada de Jesús Sepúlveda, imputado en la trama Gurtel y defenestrado por la correosa Esperanza Aguirre, tiene el aval compartido del exmandatario colérico y su calmado sucesor y llevará Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad; en similar situación de favor mutuo, Miguel Arias Cañete, se ocupará de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. La sombra de Rodrigo Rato que, a nivel personal, rechazó todas las ofertas que le hicieron con la boca chica, aparece en Cristóbal Montoro, cantado para Hacienda; Fátima Báñez, en Empleo y Seguridad Social y Luis de Guindos, el flanco más vulnerable del ejecutivo por sus vínculos profesionales (asesor de la norteamericana Lehman Brothers y la división financiera de Price Waterhouse), tras su paso por cargos de la última etapa de poder popular. (La primera, empresa norteamericana de servicios financieros, tuvo probada responsabilidad en los créditos financieros sub-prime y, con su quiebra, en la crisis de la todavía nos costará salir). Por último, y más que como un verso suelto, como un pilar regional de Rajoy, el canario José Manuel Soria salta a la política nacional al frente de Industria, Energía y Turismo. Estos son los trece nombres (el presidente no es supersticioso) de esta hora y median cien días -periodo tradicional de cortesía- para conocer sus andares.