Mujeres de cuidado – Por Cristina Molina Suárez

Tras la última victoria de Angela Merkel algunos afirmaron que estábamos ante la mujer más importante del siglo XXI que ejerce la política. Muy ilustradora fue la polémica portada del diario The Economist al día siguiente mostrando a Merkel sobre un pedestal y su dominio sobre la UE bajo el titular One woman to rule them all. Otros, en cambio, opinan que la mujer que está haciendo historia es Michelle Obama. Hay que reconocer que la muchacha llega donde otros, su marido sin ir más lejos, no llegan. Sin embargo, la Primera Dama de los Estados Unidos no tiene un perfil político propio. No es el caso de Hillary Clinton. De la época de Bill hace ya más de una década. Yo apenas la recuerdo, sin embargo, no podré olvidar la conferencia en la que Hillary me cautivó por completo.

Ocurrió en diciembre de 2011 bajo el título Free and equal in dignity and rights. Fue una intervención política y humana: Wherever you lived and whatever the circumstances of your life, whether you are connected to a network of support or feel isolated and vulnerable, please note that you are not alone. People around the globe are working hard to support you and to bring on end an into the injustices and dangers you face. Esta perla la he hecho mía, como esa nota que ponemos cerca del escritorio con una frase inspiradora que nos recuerda en cada despiste dónde estamos y a dónde queremos ir. Creo firmemente en el trabajo que infinidad de personas hacen para mejorar la sociedad. A unos les toca hacerlo desde los bajos y a otros desde los estrados; a la mayoría desde el anonimato. Creo firmemente que todos estamos llamados a dar respuesta a tanto clamor y me aferro al empeño de tantos. Hillary Clinton es, a día de hoy, la más valorada de EE. UU. por encima incluso del presidente Barack Obama, posiblemente la mejor secretaria de Estado que haya conocido Norteamérica y quién sabe si la próxima candidata demócrata a las elecciones presidenciales de 2016.
@cristination_