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Francisco Niño: “Me molestaría dejar las cosas a medias, como están todas”

   
Francisco José Niño alcalde de Arona

Francisco José Niño, alcalde de Arona. | DANIEL CETRULO

NICOLÁS DORTA | Arona

Si Francisco Niño supiese los medicamentos que curan las patologías del Ayuntamiento de Arona, unas más graves que otras, el municipio tendría socorristas en sus playas, hamacas en Los Cristianos, la garantía de un Plan General o hubiese resuelto otras dolencias cotidianas que han azotado durante este año 2013 a la administración municipal. Pero, desafortunadamente, la inmediatez del método científico médico es inaplicable en política. Por suerte, “ese toque de arte en medicina”, dice Niño, donde mejorar la salud requiere más que ciencia, puede ser una fórmula que este facultativo de formación y vocación, desarrolle en su despacho de Alcaldía de cara a 2014. Pero Niño necesita algo de tiempo, pues el pasado año ha sido un periodo “de aprendizaje a marchas forzadas”, reconoce el alcalde.

En las Navidades de hace un año Francisco José Niño fue elegido alcalde tras la inhabilitación de José Alberto González Reverón, ahora retirado de la política, después de haber sido el único primer edil que consiguió mayoría absoluta con Coalición Canaria. Niño mantiene esa mayoría pero no es Reverón, y él lo sabe. El nuevo alcalde quiere cambiar esa idea de judicialización que azotó la política aronera en los últimos años y que le costó la Alcaldía a Reverón. Quiere que “se hable de otras cosas”, dice. Sigue convencido de que su experiencia de médico aplicada al trato directo y personal le servirá para lograr apoyos o hacer fuerte a CC en unas elecciones locales dentro de dos años que son todo un dilema.

El grupo de gobierno de CC, que ahora parece más “cohesionado”, ha pasado durante 2013 por momentos complicados, por la falta de liderazgo, entre otros aspectos, que ha desembocado en una bicefalia, discreta, a la hora de tomar decisiones. Más bien una falta de rumbo, con Antonio Sosa, portavoz del gobierno local, como segundo de a bordo en un barco que de momento sigue a flote. En un encuentro con DIARIO DE AVISOS, Francisco Niño afirma que comienza a conocer más a fondo la administración municipal y a saber que las cosas llevan su tiempo. Y más en Arona: “Desgraciadamente no podemos sacar adelante ciertos proyectos con la rapidez que nos gustaría, pero lo importante son los resultados; estoy convencido de que hacemos todo lo posible para mejorar la calidad de vida de los vecinos, que Arona sea un referente donde se pueda invertir y vivir”, dice el alcalde. Para el nacionalista, la administración “es lo que es”, y “todo lleva sus plazos”. “Los tiempos están cambiando a la hora de obtener resultados inmediatos”. “Tenemos que pasar por un filtro burocrático grande cuando se tramita un expediente y esto ha sido causa muchas veces de atrasos”, asegura.

El dilema

Este año el Plan General de Arona (PGO) ha quedado suspendido en varios de sus ámbitos por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias. Ha sido sin duda una de las peores noticias para el Ayuntamiento y sus responsables, que ya tenían un documento sobre la mesa, gustase más o menos, aprobado definitivamente , que daba cierta “tranquilidad”. Aunque no era el PGO deseado, permitía modificaciones que cambiaban el escenario, como la regularización de las discotecas, la homogeneización de la zona comercial con las licencias en subterráneos, y otros detalles que daban aire a un planeamiento obsoleto. La sentencia del TSJC, recurrida por la Cotmac y admitida a trámite, deja en stand by al PGO, aunque hasta que no sea firme, seguirá adelante. Así lo afirma Niño, consciente de que camina sobre una cuerda floja al respecto. Asegura que el PGO “está ahora mismo en vigor hasta que no haya un sentencia definitiva y nosotros haremos las modificaciones puntuales que sean necesarias para seguir adaptándolo a las necesidades de Arona”, explica. “Hay vías que se pueden llevar a cabo y en eso estamos”, dice el primer edil.

Las playas sin socorristas

Los socorristas de Arona han ocupado en 2013 el salón de plenos, generalmente con escaso público, reclamando sus derechos. Siguen en una situación lamentable, sin empleo ni sueldo desde agosto de 2012, mientras Arona promociona en ferias turísticas sus playas con la accesibilidad como uno de los principales reclamos. En esta paradoja vive el municipio, que ha estado todo este año sin servicio de socorristas en vigor. Los que han aguantado ya ni siquiera figuran en la Seguridad Social y piden dinero en el paseo a los turistas, y ganan lo que pueden con el baño adaptado de Las Vistas. Incluso la patronal turística Ashotel les ha echado una mano con material de primera necesidad. Esta es la imagen en 2013 que ha trascendido incluso a los medios de comunicación extranjeros e incluso al Gobierno británico, que advertía de la falta de efectivos en las playas.

El Ayuntamiento ha tenido que asumir la deuda que mantiene la empresa Sport and Salvament, ahora desaparecida, con estos socorristas, a reclamo de la Seguridad Social. También ha aguantado dos concursos declarados desiertos y ahora espera resolver el conflicto con una nueva licitación que se prepara. Niño apunta la posibilidad, antes inviable según el Ayuntamiento, de rescatar transitoriamente el servicio mientras se adjudica.

“Lo que no es lógico y razonable es que estos jóvenes sigan en las condiciones actuales”. “Esperamos que la licitación se lleve a cabo pasados estos primeros días del año, de manera urgente”, apunta el edil.

Inversiones

Sobre inversiones Arona tampoco ha tenido mucho que decir en 2013. El Ayuntamiento tiene dinero ahorrado, las cuentas van bien, paga a sus proveedores en tiempo y forma, pero no encuentra la manera de destinar el dinero en obras que la ciudadanía pueda palpar. “En 2014 priorizaremos en mejorar las carreteras que el temporal ha deteriorado y en algunas instalaciones municipales, como centros cívicos y polideportivos”, apunta Niño. A esto se añade la colaboración que tiene Arona con Turismo de Tenerife para mejorar los espacios turísticos obsoletos. También la playa de Los Tarajales, una asignatura pendiente, parece que puede ejecutarse en una primera fase este año. “Será una playa de arena en condiciones, no de machaqueo, y ya tenemos el permiso medio ambiental”, apostilla.

Por otro lado Niño aboga por mejorar la imagen de la Policía Local. “Hace una labor encomiable, en el temporal estuvo en todo momento activa y se merece el respeto, trabajaremos este año para dignificar su imagen”, sostiene. “Muchas veces la imagen que se le ha dado de la Policía no es real y eso hay que cambiarlo”, insiste el alcalde.

Igualmente, la corporación municipal tiene pendiente sacar a concurso el servicio de grúas municipales que funciona en precario, tras un pleno que acordó seguir con el servicio mientras se establezcan los trámites de adjudicación. Por otro lado queda por formalizar un contrato estable con los miembros de Protección Civil. “Me molestaría dejar las cosas a medias, como están todas”, concluye el alcalde de Arona.