Las primarias del PSOE tensan la relación UGT-Gobierno canario

Hernández Spínola conversa con López Aguilar. / JAVIER GANIVET

DOMINGO NEGRÍN MORENO | Santa Cruz de Tenerife

La estruendosa denuncia lanzada la semana pasada por el secretario general de la UGT en Canarias, Gustavo Santana, especialmente contra los dos dirigentes socialistas integrados en el Ejecutivo regional a cuenta de los liberados institucionales simboliza el pistoletazo hacia las primarias del PSOE.

Se da la curiosa circunstancia de que dos de los eventuales candidatos a la presidencia del Gobierno canario son precisamente el actual vicepresidente y líder del PSC-PSOE, José Miguel Pérez, y el consejero Francisco Hernández Spínola. Presumiblemente, a ellos se sumarán Manuel Marcos Pérez (vicesecretario, al mismo nivel que Spínola) y Gustavo Matos, director general de Comercio. Aunque aún no se han colocado el dorsal correspondiente, van tomando posiciones en la línea de salida.

Las fuentes del partido consultadas por este periódico eluden confirmar ese extremo, pero tampoco lo descartan. No están dispuestos a conceder ventaja a sus respectivos adversarios. De un lado, José Miguel Pérez y Hernández Spínola no van a entrar al trapo salvo que la situación se complique. En el sector renovador representado por la plataforma de debate Bases 20.20 prefieren avanzar con pies de plomo. De momento, los afines a Matos se limitan a reclamar que en Canarias se aplique el sistema de primarias abiertas a no militantes, que regirá para el proceso federal y que el PSOE de la Comunidad Valenciana ha puesto en marcha al formalizar su candidatura Ximo Puig, secretario general del PSPV, y Toni Gaspar, alcalde de Faura.

En este juego de intereses, a Santana se lo asocia con el eurodiputado Juan Fernando López Aguilar, a quien sustituyó como diputado nacional. Aun cuando el dirigente sindical se desmarca de la lucha por el poder, durante una entrevista publicada por el DIARIO invitó a los afilialos de la UGT a participar masivamente en las primarias para transformar el PSOE. “Nosotros nunca hemos abandonado nuestros postulados”, decía en alusión a la frase con la que Alfredo Pérez Rubalcaba clausuró la conferencia política. “Hemos vuelto”, proclamó entonces el secretario general. Su relación con José Miguel Pérez no cabe calificarse de idílica. La realidad es que prácticamente no ha existido.

Spínola era de la cuerda de Aguilar. Sin embargo, ahora toca otra melodía y están intentando que desafine. No parece factible que el ex número uno regrese a la arena política isleña. Como mucho, hay quienes lo postulan para competir contra Rubalcaba o sus herederos. “Me lo estoy pensando”, ha confesado. Tal vez se decida si Elena Valenciano lo desplaza como cabeza de cartel en la campaña para los comicios del 25 de mayo.

Entretanto, Manuel Marcos Pérez medita desde su puesto de presidente de la gestora insular de La Palma. La experiencia de 2010, cuando perdió ante José Miguel Pérez para la secretaría general, lo ha curtido en estas lides y se ha armado de valor para seguir en la legítima pugna.

La supuesta ruptura del pretendido diálogo social ha estallado en medio del desconcierto por unas graves acusaciones de “compra de voluntades” respondidas con reproches al “activismo político” de la organización hermana, en sus orígenes.