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Nuevas quejas de los vecinos por el agua de color marrón

   
Los vecinos quieren evitar tener restricciones en el consumo. / F. PALLERO

Los vecinos quieren evitar tener restricciones en el consumo. / F. PALLERO

G. G. | Puerto de la Cruz

Pese a que el 29 de abril Salud Pública levantó la medida preventiva de restricción de uso del agua de la red de abastecimiento público, que afectaba desde el 28 de febrero a los barrios de Las Dehesas, Las Águilas, Las Arenas, San Fernando, San Antonio-Esquilón, Taoro-Malpaís y La Vera, en Puerto de la Cruz, hay vecinos que desde hace una semana han vuelto a tener agua de color marrón en su hogares, sobre todo de este último núcleo.

“No pasó una semana del levantamiento de la restricción y ya hay quejas de que el agua sale sucia del grifo otra vez y sobre todo con arenilla”, aseguran miembros de la plataforma Afectados por Aqualia. Como consecuencia, muchos se han visto obligados nuevamente a comprar garrafas de agua mineral para beber y preparar alimentos.

Sin embargo, fuentes del Área de Salud de Tenerife y de la empresa Aqualia, concesionaria del servicio, confirman que las analíticas realizadas hasta ahora no revelan ninguna anomalía. Por el contrario, “cumplen los requisitos fijados en la actual normativa y por lo tanto, el agua es apta para el consumo”.

Es más, ambas entidades precisan que la semana pasada hubo un problema puntual en un edificio de la zona de Las Cabezas, “que ni siquiera estuvo afectada por la restricción”, y que se solucionó ese mismo día.

La plataforma comunica a todos los ciudadanos afectados y a las instituciones responsables, su “malestar por la repetición de los problemas supuestamente resueltos. El agua es un bien básico de primera necesidad, y el no disponer de agua potable de nuevo o crear inseguridad en el consumo nos convierte en un municipio tercermundista”.
El jueves los miembros de este colectivo mantendrán una reunión con los responsables municipales, de Aqualia y también quieren que acuda algún representante del Cabildo de Tenerife y del Consejo Insular de Aguas, para solicitarles que se adopten todas las medidas con el fin de depurar responsabilidades por lo ocurrido hace dos meses atrás y evitar que se repita otra vez.