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Los vigilantes de las aguavivas

   

TINERFE FUMERO | Santa Cruz de Tenerife

Se llama Red PROMAR (Programa acerca de las Proliferaciones de Organismos Marinos en Canarias) y pretende que la colaboración ciudadana se convierta en una herramienta más del programa del mismo nombre, que se erige como respuesta del Ejecutivo autonómico a la creciente llegada de medusas (entre las que se encuentran las aguavivas) y otros organismos marinos.

Aunque creada el verano pasado, es en este 2014 donde se prevé chequear la utilidad de este servicio en el que colaboran ayuntamientos y cabildos. De momento, Gran Canaria y Fuerteventura han sido las más afectadas este año, aunque Tenerife y La Gomera ya han sufrido alguna invasión.

A través de esta Red PROMAR, se invita a toda la ciudadanía a que se inscriba como observador de nuestras costas, una tarea que si bien resulta de mayor utilidad en el caso de las medusas o las llamadas mareas rojas, también colabora con otros programas como el de la tortuga verde.

Y si le pica una medusa, lave la herida, pero no se rasque y no aplique calor; quite los restos de tentáculos con guantes o pinzas, pero no toque la medusa; aplique frío o hielo durante 5-15 minutos, pero evite el contacto directo del hielo con la piel. Pida ayuda al socorrista…, y si aún le quedan ganas, informe.

Cómo evitarlas
La única manera de evitar las picaduras es no bañarse. No las subestime.
No tocar nunca las medusa. Pican aún muertas.
Si ha habido contacto, no se lleve las manos a los ojos o boca. Ahí duele más.
Las cremas disminuyen el riesgo pero no lo evitan.
Si se está bañando y las ve, salga sin prisa. Las brazadas enérgicas las atraen.
Grupos de riesgo: niños, ancianos, personas con antecedentes alérgicos, cardiovasculares o asmáticos, o que hayan sido picados previamente por medusas.