X
opinión >

‘Paco’, un desecho – Por Sergio García de la Cruz

   

Detengámonos unos segundos y pensemos en el gran problema que supone la droga para todos los habitantes de este mundo, aunque cierto es que para algunos no supone un problema sino que un gran beneficio, al menos monetario, porque indirectamente tarde o temprano también terminará siendo víctimas de este mal endémico. Tal vez ha llegado el momento de comenzar a plantearnos otros posibles frentes de lucha contra la droga, y cuando hablo de lucha no solamente me estoy ciñendo a una confrontación sino que hay que abrir nuestras mentes y buscar otras vías, las actuales no son del todo correctas ni efectivas.

La crisis lejos de acabar con el consumo lo aviva, con ésta se producen ciertos cambios, uno: aumenta el consumo, sobre todo de personas que habían superado su adicción tiempo atrás, otro: se busca droga barata. Del otro lado tenemos a los vendedores, que aumentan y reducen la calidad de la mercancía que someten a una mayor cantidad de “cortes”, convirtiendo el veneno en más tósigo si cabe. Aumenta los laboratorios caseros. Todo el mundo quiere sacar tajada de este vil negocio, y ante esto nuestra solución es tan simple y básica como aumentar las penas y llenar las cárceles creando un bucle sin fin.

Paco es queroseno y amoniaco, sí, así es, ni más ni menos, es un desecho. A partir de la hoja de coca existen diferentes formas de extracción de la cocaína y de sus otros derivados, entre ellos el crack, tan habitual en nuestras islas. El principio activo en todos los derivados es siempre la cocaína. En el proceso de elaboración del clorhidrato de cocaína se producen varios derivados fumables de la coca que se diferencian esencialmente por la concentración de sulfato de cocaína que contienen, y por la presencia diversa en su composición de los residuos de los compuestos químicos utilizados en el proceso. La forma de consumo es fumada, los menos la mezclan con tabaco, la mayoría la fuma haciendo una pipa casera con distintos elementos de uso cotidiano. Quienes utilizan pipas con metal, es característico las quemaduras labios y sus manos por el exceso de temperatura que adquieren estos elementos.

Los precursores químicos son necesarios para la fabricación de las drogas, mundialmente existe un consenso general de controlarlos, principalmente de ellos dos sustancias químicas utilizadas en el proceso de elaboración de cocaína y heroína, el permanganato potásico para la primera y el anhídrido acético para la segunda, esto produce dos situaciones, la primera se produce en otro mercado paralelo de traficantes de precursores, la segunda es que ante su escasez se utilizan otras sustancias más caseras y más dañinas si cabe, aunque ya los traficantes han encontrado la forma de eludir los controles y los mecanismos de vigilancia.
Personalmente siento tristeza ver como en ciertos países latinos americanos las drogas destruyen de forma arrasadora a miles de jóvenes, como una epidemia arrasa con todo lo que se va encontrado a su camino, desde vidas a humanas hasta instituciones políticas. Sistemas que se ven desestabilizados por el poder de las drogas por el poder.

www.sergiogarciacruz.com