Tíncer reclama al Cabildo la parada del tranvía prometida desde 2009

La instalación se ubicará, según las previsiones, entre las paradas de Tíncer y San Jerónimo. / DA

JESSICA MORENO | Santa Cruz de Tenerife

Los vecinos de Tíncer llevan más de cinco años esperando la puesta en marcha de la parada del tranvía en La Campana, tal y como se acordó antes de la inauguración de este recorrido entre los residentes de este barrio de la capital, el Cabildo y el Ayuntamiento de Santa Cruz. Pese al tiempo transcurrido, el compromiso no ha sido cumplido y, además, tampoco se ha podido poner en servicio la calle Prolongación Andrés Orozco. El motivo de ambos retrasos es que no se ha solucionado la sujeción de la ladera de esta vía, en la que hay que construir un muro de contención por parte de un particular.

En el año 2009 se puso en servicio la Línea 2 del tranvía, entre Tíncer y La Cuesta, dos años después de que se inaugurara el sistema tranviario en la Isla. Este recorrido de momento tiene cuatro paradas propias (y dos compartidas con la Línea 1) pero la idea es que una vez haya disponibilidad presupuestaria se amplíe hasta La Gallega.

Antes de esta extensión, tras la demanda de vecinos de la zona y comerciantes, se acordó crear una parada entre Tíncer y San Jerónimo, que se llamará La Campana. La idea era que, con un presupuesto de un millón de euros, estuviera en servicio aproximadamente en 2010, pero hasta la fecha esta dotación no se ha construido.

El presidente de la asociación de vecinos de Tíncer, Antonio Santos, explicó a DIARIO DE AVISOS que tanto la parada del tren ligero como la calle permitirá un importante desahogo para los vecinos -no solo de este barrio sino de los cercanos, tales como La Gallega o El Tablero- y para los comerciantes de la zona, lo que según sus cálculos, podría beneficiar a más de 20.000 personas. Criticó la actitud del Cabildo y pidió a la Corporación insular que asuma el coste del muro de contención necesario en la vía, el cual debería pagar el constructor propietario del solar afectado.

Santos no descartó solicitar próximamente un encuentro con los responsables insulares, al igual que iniciar medidas de presión por parte de los vecinos, como cortes en el tranvía. “Las administraciones se tiran la pelota y los perjudicados somos los vecinos”, aseveró. Cabe recordar que para poder iniciar los trabajos es necesario tanto la obra de seguridad como la retirada de una torreta de luz.