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El 80% de los condenados en las Islas el año pasado fueron españoles

   
Casi la mitad de los delitos cometidos el pasado año en el Archipiélago ‘esquivaron’ la prisión. | DA

Casi la mitad de los delitos cometidos el pasado año en el Archipiélago ‘esquivaron’ la prisión. | DA

JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife

Varón, de nacionalidad española, de entre 30 y 40 años de edad y sobre el que pesa una pena contra la seguridad colectiva. Este es el perfil más habitual del delincuente condenado en Canarias en el año 2013. Así reza en el Registro Central de Penados, elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) con los datos aportados por el Ministerio de Justicia. Este retrato-robot echa por tierra aquel controvertido tópico que vincula a los inmigrantes con la delincuencia en el Archipiélago, ya que los números son del todo concluyentes.

Y es que, según el referido registro, de las 11.756 personas condenadas en las Islas el año pasado, el 80% fueron nacionales, fundamentalmente hombres. Por provincias, las cifras son igual de significativas, ya que en Santa Cruz de Tenerife de los 5.554 condenados, 4.596 fueron españoles, por 958 extranjeros. Una estadística similar a la cotejada en la provincia de Las Palmas, donde hubo 6.202 condenados, de los que 5.064 fueron nacionales. Estas diferencias por nacionalidad son igual de significativas que si nos atenemos al sexo del delincuente, ya que apenas el 11% de los penados en 2013 en Canarias fueron mujeres.

El Archipiélago, según los datos recopilados por el INE, fue el año pasado una de las comunidades donde se produjeron mayor número de condenas -la quinta región con la cifra más elevada-, con una tasa de 6,8 por cada 1.000 habitantes mayores de 18 años. Resulta paradójico teniendo en cuenta que la población canaria es muy inferior a la de comunidades como Madrid, Cataluña o Andalucía, que se situaron con valores inferiores a los registrados en las Islas, cuya tasa además fue muy superior a la media del Estado (5,7).

Pese a todo, como recuerdan desde el propio Ministerio de Justicia, la comisión de un delito no implica imperativamente el ingreso en prisión. Tan solo un cuarto de las penas conllevaron el camino a la cárcel para sus autores; en la mayoría de los casos, por robos, tirones y atracos. De hecho, la estadística revela que los principales delitos cometidos en Canarias en 2013 fueron contra la seguridad colectiva (básicamente, contra la seguridad vial), con un total de 6.468 condenas. Por detrás, le siguieron los delitos contra el patrimonio y el orden socioeconómico (2.918) y las lesiones (1.821). En la orilla opuesta aparecen las torturas y delitos contra la integridad moral (185), los vinculados a la libertad sexual(121), los homicidios en todas sus formas (92) y los delitos contra la Administración pública (63).

Reincidentes
Mientras, en lo que se refiere al número de delitos cometidos, por regla general se trata de condenados por uno solo (9.874, más del 80% del total), aunque hubo 141 personas condenadas por la comisión de hasta tres o más infracciones. Resulta llamativo, no obstante, que el volumen de mujeres condenadas casi se ha duplicado desde el año 2007, mientras que el de los varones acumula dos ejercicios a la baja.

En esta misma línea, el Registro Central de Penados recoge las distintas penas por edad, sexo y nacionalidad que se impusieron a los malhechores. Al igual que sucede con los delitos, priman los varones españoles de entre 35 y 45 años de edad, y en la mayoría de los casos las condenas fueron de prisión (7.176, el 60% del total de condenados) o la realización de trabajos en beneficio de la comunidad (5.110), aunque también hubo muchas inhabilitaciones especiales para el empleo (5.077), multas (4.421) y privaciones del derecho de conducir vehículos (3.761 penados).

Por contra, sólo se produjeron 19 expulsiones del territorio nacional, una medida contemplada para los inmigrantes. Ello vuelve a contradecir los tópicos que señalan a buena parte del colectivo de foráneos como el gran culpable del clima de inseguridad que reina en muchas ciudades de Canarias.

Casi 100 delincuentes de más de 70 años
J. L. C. | Santa Cruz de Tenerife

Junto al manido tópico de la inmigración, también es muy habitual que se vincule a los jóvenes en exclusión social con la delincuencia. Nada más lejos de la realidad. Según los datos del Registro Central de Penados del Instituto Nacional de Estadística, el 30% de los condenados en Canarias el año pasado tenía entre 41 y 50 años de edad. En cambio, apenas el 8% estaba entre los 18 y los 25 años. De igual modo, también destaca el hecho de que 378 personas contaban con más de 60 años y 92 con más de 70. Pese a todo, al margen de la edad que carguen sobre sus espaldas, la inmensa mayoría escarmienta a la primera o no tiene más oportunidades para vulnerar las leyes. Por ello, casi el 80% cometió un único delito.

El mencionado registro de penados recoge algunos otros datos muy singulares, como pueda ser la nacionalidad de los condenados en 2013 en el Archipiélago. En la provincia de Santa Cruz de Tenerife, por ejemplo, de los más de 5.000 condenados, sólo 5 fueron de Oceanía y 20 de Asia, por 466 de algún país de América, fundamentalmente Latinoamérica. Mientras, entre las penas que se impusieron, hubo hasta 1.864 prohibiciones de aproximarse a la víctima y 1.556 de comunicarse con ella. Además, también se decretó la privación del derecho de tenencia de armas en 1.596 casos y se impusieron 4.421 multas, la mayor parte de ellas a ciudadanos de nuestro país (3.604). Hubo también hasta 5.110 penas de trabajos en beneficio de la comunidad, el 90% para españoles.