La montaña rusa de Laura Palacio

Laura Palacio, pudo estar en Bremen gracias a la ayuda del OAD de La Laguna y Health & Sport. / DA

JUAN S. SÁNCHEZ | Santa Cruz de Tenerife

Laura Palacio fue a Bremen para tocar el cielo… y lo tocó. La karateca madrileña afincada en Tenerife consiguió su gran objetivo, que era regresar a la Isla con un metal en el Campeonato del Mundo celebrado en la ciudad alemana. Su botín fue la medalla de bronce en kumité y el cuarto puesto por equipos.

“Cada vez que pienso en cada madrugón para entrenar, cada lesión sufrida hasta llegar aquí, tantas lágrimas, tantas risas…, me sale una sonrisa de oreja a oreja por haber conseguido este importantísimo objetivo, impensable hace unos años”, reconocía una Laura que comenzó el camino hacia el podio ganando a las representantes de Canadá y Argelia para caer luego frente a la de Irán. Al llegar la iraní a la final, Palacio se metió en la repesca y allí protagonizó el combate del campeonato con la belga Laura Pradelli a la que le remontó un marcador adverso para meterse en la siguiente ronda (9-6).

“El campeonato ha supuesto en mí una montaña rusa de emociones. En cuatro días he pasado por diferentes momentos de euforia, pasando por la calma, los nervios y la alegría desbordante cuando se consiguió la medalla”, confesaba Palacio, que a sus 28 años está en el momento de madurez deportiva que le puede permitir seguir sumando alegrías a su ya importante currículo.

Tras la batalla ante Pradelli, Laura superó a la veterana holandesa Vanesca Nortan con algo más de tranquilidad (6-1) ya dentro de la jornada del sábado, la misma en la que tendría que jugarse la medalla frente a la húngara Nikola Bartha en un ambiente de lujo en el OVB Arena.

Con el bronce en liza, Laura abrió el marcador y desde entonces, con su velocidad y explosividad controló el combate y siguió aumentando su renta para terminar pasando por encima de la competidora magiar (8-3) y alcanzar con brillantez el tercer peldaño del podio.

Sin tiempo para celebrar y mucho menos para descansar, Laura formó parte del equipo español junto a Cristina Vizcaíno, Irene Colomar y Cristina Ferrer, consiguiendo meterse en las semifinales después de superar en las rondas previas a los combinados de Brasil, Rumanía, la poderosa Irán y Grecia.

Egipto, un país donde el número de licencias multiplica por mil las que existen en España, fue el verdugo en la penúltima ronda en una eliminatoria muy ajustada.

Otra vez tocaba luchar por el bronce, otra vez tocaba subirse a la montaña rusa. Y en ella estuvo de nuevo Laura Palacio con sus compañeras peleando hasta el último suspiro de un duelo que se resolvió para el bando otomano por la suma de puntos obtenidos en los tres combates disputados.

Las conclusiones de la madrileña afincada en Tenerife no pudieron ser mejores. España regresó de Bremen con cinco medallas, cuatro de bronce y una de oro en katas por equipos.