“El Polígono está desaliñado y debemos mantenerlo entre todos”

La falta de poda en las palmeras se convierte en un peligro para la circulación de vehículos. | NORCHI

NORBERTO CHIJEB | Candelaria

De “desaliñado” calificó el estado actual del Polígono Industrial del Valle de Güímar el alcalde de Candelaria, José Gumersindo García Trujillo, quien reconoce que es necesario llegar a un acuerdo urgente para mantener la zona en las condiciones en que fue entregada a los ayuntamientos de Güímar, Arafo y Candelaria hace año y medio.

García Trujillo reconoce que “ha habido dejadez en el mantenimiento al no constituirse la entidad de conservación” e insiste en que “los tres ayuntamientos y los empresarios tenemos que llegar a un consenso para evitar que la costosa rehabilitación que se realizó en el Polígono no caiga en saco roto”.

Tanto el Ayuntamiento de Candelaria como el de Arafo son partidarios de que los empresarios que desarrollan su actividad en el Polígono Industrial paguen un canon por el mantenimiento, mientras que Güímar entiende que éstos ya pagan sus impuestos y deben quedar libres de esa carga. Estas posturas encontradas es lo que ha llevado al Cabildo a reunir a todas las partes para tratar de alcanzar una solución y poner en marcha un ente que permita que la limpieza de jardines y aceras, la seguridad y la luz no deterioren más de un millón de metros cuadrados que dan cobijo a más de 200 empresas y casi 2.500 trabajadores. Tras una primera toma de contacto la semana pasada, “con propuestas interesantes”, según afirma el alcalde de Candelaria, está previsto que esta semana se vuelvan a reunir representantes de los ayuntamientos, Cabildo y empresarios para llegar a un acuerdo definitivo, con la posibilidad más que real de que la institución insular también forme parte de esa entidad de conservación tan necesaria para que el Polígono Industrial del Valle de Güímar no se convierta, por ejemplo, en una ciudad sin ley como el de La Campana en el municipio de El Rosario.