Escaparates con historia

Pedro del Castillo (i), Carlos González y Ángeles Palmero, ayer en rueda de prensa. / FRAN PALLERO

NATALIA TORRES | LA LAGUNA

Innvovador. Esta fue la palabra que más se repitió ayer en la rueda de prensa que sirvió para presentar el proyecto El Museo en el escaparate, una iniciativa que llevará a los escaparates de una veintena de comercios de La Laguna piezas de los siglos XVIII, XIX y XX que pertenecen a distintas colecciones del Museo de Historia y Antropología de Tenerife (MHAT) cuya sede se encuentra en La Laguna.

Esta iniciativa, que se prolongará durante todo el mes de junio, parte de la colaboracióne entre Alapyme y el propio museo, además de contar con el apoyo de la Cámara de Comercio de Tenerife, Banca Cívica y del Ayuntamiento. Carlos González, gerente del Organismo Autónomo de Museos resumió el proyecto como el mejor ejemplo de hacer visible al museo, “hacerlo transparente” dijo, aprovechando para ello la promoción turística y el desarrollo del comercio.

La mayoría de comercios que participan en esta novedosa iniciativa de sacar el museo a la calle se aglutinan en la céntricas calles de Herradores y Obispo Rey Redondo, pero también de las calles Heraclio Sánchez y San Agustín. Los comerciantes han contando con el asesoramiento del personal del museo para la ubicación de las piezas y en algunos casos incluso ha sido este personal quien ha montado el escaparate en cuestión.

Según explicó el coordinador del Museo de Historia, Fernando Estévez, “no hay un hilo conductor en esta muestra de escaparates, la temática es variada y precisamente es la idea que queríamos, que cada escaparate sea una historia disntinta”. Los objetos que se exponen pertenecen a los fondos del museo y no se encuentran expuestos en la colección permanente.

Estévez argumentó que esta idea tan novedosa surgió de la propia separación existente desde siempre entre comercio y cultura, “desde que Jesús echó a los mercaderes del templo”, intentando reflejar que aquellas cosas que se ofrecen en los escaparates son las mismas que cuando dejan de ser útiles pasan a formar parte de la historia.

Desde Alapyme, su representante, Pedro del Castilo, se mostró muy orgulloso de participar en un proyecto de este calado, del que dijo que “auna historia y cultura y nosotros como asociación que representa al Casco, no podíamos dejar de participar”.
Ángeles Palmero, de la Cámara de Comercio, también alabó la iniciativa añadiendo que “comercio y cultura en este caso confluyen en un mismo punto que es el de la contemplación”.

Por su parte, el representante de Banca Cívica, agradeció a los usuarios de la entidad su apoyo a esta iniciativa, que al final ha reportado 6.000 de los 30.000 euros en los que está valorado El Museo en el escaparate. Estévez señaló que “la propia instalación con piezas de museos, permitirá apreciar la continuidad histórica de la actividad comercial, al tiempo que a no olvidar que los objetos de museos fueron, en origen, mercancías”.