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“Busco el estilo propio de la persona, adecuado a la imagen que se quiere proyectar”

   

Por INMA MARTOS

-¿Cómo es el trabajo de una personal shopper?
“No es un concepto aún muy conocido, pero ya va entrando. Se trata de una asesoría de imagen con un cliente o clienta particular. Se puede hacer una asesoría completa, lo que incluye un estudio del aspecto físico, personalidad, modo de vida, el tiempo que se dedica a cada ámbito, entorno familiar social. Se valora y analiza todo y se saca un perfil físico y personal. Esto se hace mediante una entrevista y de todo se recoge información. Cómo lleva el pelo, de qué forma se pinta los ojos, los gestos de estilo, si son desenfadados o más clásicos, más ordenados. Se suele realizar a través de unos test establecidos que se adaptan a cada uno. Busco el estilo propio de la persona, adecuado a la imagen que se quiere proyectar”.

-¿Quiénes utilizan este tipo de servicios?
“El perfil que más trato está mujeres de edades comprendidas entre los 28 y 54 aproximadamente, también algunos chicos. Los hombres, cuando acceden a mis servicios son mucho más concienzudos y tienen claro que van a seguir mis recomendaciones a pies juntillas. Las chicas son más celosas de su estilo propio y dudan más de los consejos”.

-Siempre se ha asociado a un perfil de personas con alta capacidad económica, ¿es un servicio muy caro?
“No es caro. Todo el mundo puede acceder. Por ejemplo, yo tengo tarifas adaptadas a Canarias porque quiero trabajar, no quiero que se crea que esto es solamente un servicio de lujo. Una hora de shopping son 50 euros, aunque es verdad que la primera vez, con una hora quizá no es suficiente. La consulta inicial de perfil, no se cobra. Desde el principio me ha tocado explicar de qué va esto, entonces me tomo un café con los clientes y lo explico, intento adaptarme mucho a las necesidades y les planteo justo lo que les va a venir bien y a lo que le van a sacar mayor partido”.

-Registra los armarios de los clientes…
“También. Yo recomiendo un análisis de armario porque el fondo de armario de una persona da mucha información. ¿Qué se tiene?, ¿qué no se tiene? y ¿qué es lo que falta? para sacarle mayor partido a lo que se tiene. Nuestra imagen es nuestra tarjeta de presentación y el armario es como un diario personal”.

-¿Todas las personas tenemos nuestro propio estilo?
“Creo que sí, ya que el estilo depende de la personalidad, pero hay gente que no lo sabe o bien, que no lo tiene muy definido. Hay gente que no tiene muy claro por dónde tirar, le gusta un estilo y otro y no sabe muy bien cómo combinarlo. Eso sí lo trabajo mucho. Yo me adapto, no les creo un uniforme, les ayudo a entender las combinaciones, las formas de las prendas para ver cuáles se adaptan mejor a su figura, qué es lo que le va mejor para estilizar o los colores que le van mejor y que sean ellas mismas. Yo no las voy a disfrazar de nadie”.

-¿Qué hay de las tendencias?, ¿se adapta mucho a la moda?
“Las tendencias es algo que está ahí, pero yo creo que es algo visual, es la forma en que nosotros evolucionamos respecto a la imagen que tenemos. No es estrictamente necesario seguir las modas, pero están ahí. Algo que ha pasado de moda es algo que nos hemos cansado de ver, nada más, e inconscientemente todos atendemos a las tendencias. Si tratamos a una persona que sea muy fashion, lógicamente les aconsejo prendas de moda, pero si es muy clásica, no le voy a poner fluorescentes por mucho que se lleven”.

-¿Qué es lo que no le debería de faltar a una mujer en el armario?
“Pienso que por lo práctico, unos vaqueros que le queden perfectos, y una camisa blanca. No necesariamente deben ser de marca, pero sí que queden bien y den aspecto de calidad. No importa que sea una prenda sintética y que haya costado muy barata, pero que realmente tenga una estética de calidad, que las hay. Por ejemplo, yo con mis clientas voy mucho a franquicias… y la ropa no es cara”.

-¿Y en un hombre?
“Lo del vaquero es universal. Pero el hombre también es más limitado. Creo que debe tener en cuenta lo de la estética de calidad y que la ropa le siente bien”.

-¿Cómo vestimos los canarios?
“(Risas). Yo creo que nos falta mucho, la gente no se atreve. Si es verdad que los jóvenes se atreven más a experimentar y eso es bueno. Si eres joven, no tienes muy claro nada, pero quieres experimentar con todo, eso te puede dar luego la seguridad de conocerte bien y tener un look que vaya contigo. Pero creo que llegamos un poco tarde, y hay mucha uniformidad en la calle, vamos todos muy iguales”.

-¿Hay variedad de ropa en las tiendas?
“El vestuario es bastante limitado. Los propietarios de los comercios tampoco se arriesgan porque tienen miedo de no venderlo, debido a ese poco atrevimiento del que hablaba. Hay marcas pero la selección que hacen se queda corta, dejan lo más atrevido. El estilo de las prendas que eligen es muy conservadora, todo demasiado igual”.

-En cuanto a los cuerpos. ¿Es igual de fácil vestir a todos los cuerpos?
“Las formas del cuerpo suponen el límite para la forma de vestir, no solo por tallas sino por la propia silueta. Lo importante es que la persona se sienta bien. Si eres un poco gruesa, lo que se busca es estilizar la figura y buscar los puntos un poco más atractivos o que más gusten y resaltarlos disimulando los que menos te gusten”.

-Pero no necesariamente a una persona delgada le queda bien todo, idea que está bastante extendida por el ejemplo de las modelos de pasarela.
“No, para nada. Las modelos están ahí en un show y tienen luces, cámara y acción, luego las ves en la calle y la mayoría de las prendas les quedan muy sueltas, no es real, una mujer con curvas llena mucho más la ropa. Es mucho más difícil por ejemplo vestir a una persona muy delgada y sin formas, que a una que sea un poco más voluptuosa. Las curvas siempre llenan más, y a la vista resultan atractivas, la silueta ideal es la de reloj de arena. Yo pienso que son tendencias en pasarela y en imagen pero ese perfil se ha ido ampliando en los últimos años y se han recuperado las antiguas tops, señoras de cuarenta años con cuerpos de mujer, y personalidad contundente, no niñas de veinte que apenas están formadas. Es puro escaparate”.

-¿Dónde la puede encontrar la gente interesada en su servicio?
“Yo trabajo sobre todo por el boca a boca. Tengo además un blog: www.theshockingpink.blogspot.com. Y bueno, a través de mi teléfono: 605 495 677. Además de asesoría y personal shopper también hacemos talleres de estilo y asesoría de imagen y color para grupos”.

-Alguien podría pensar que se trata de un trabajo muy frívolo…
“Esta es la pregunta del millón. Sí, mucha gente lo piensa y me lo cuestiona, pero no es frívolo, nuestro aspecto es la imagen que proyectamos todos los días al exterior, de él depende la imagen que se quiere dar y es importante que sea coherente con quiénes somos”.