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Rivero asegura que la intervención en CajaCanarias responde a “la defensa del interés general”

   

Paulino Rivero, en su intervención en el pleno de ayer para explicar sus decisiones sobre CajaCanarias. | J.C.

Paulino Rivero, en su intervención en el pleno de ayer para explicar sus decisiones sobre CajaCanarias. | J.C.

VICENTE PÉREZ | Santa Cruz de Tenerife

La controvertida intervención del Gobierno regional en CajaCanarias para nombrar una gestora que convierta la extinta entidad financiera en fundación llegó ayer al Parlamento autonómico, de la mano del PP, que pidió explicaciones al Ejecutivo regional. El presidente Canarias, Paulino Rivero, reiteró sus argumentos de días pasados, al justificar esta decisión para cumplir la ley “por encima de todos y de todo” y evitar que 140 millones de euros de patrimonio quedasen fuera de control.

Rivero señaló que en la designación de la gestora “solo” ha perseguido un objetivo: aprobar la creación de la fundación -dado que, según subrayó, la prevista por los anteriores gestores de la caja no cumplía los requisitos legales- por lo que una vez puesta en marcha, las cinco personas nombradas para comandar este proceso “habrán terminado su trabajo”. En concreto, se trata Marisa Tejedor, ex rectora de la Universidad lagunera; Miguel Becerra, gerente de Gestur; Rafael Daranas, exvicepresidente de CajaCanarias; Juan Alberto Martín, expresidente de la ZEC, y María Dolores Pelayo, exdiputada y abogada; los tres primeros vinculados a CC y los dos últimos al PSOE, por lo que el parlamentario del PP Asier Antona no dudó ayer en descalificar esta gestora como “política”.

Rivero detalló que el patrimonio de CajaCanarias ronda los 160 millones de euros pero sólo había destinado 20 millones al fondo dotacional de la fundación, con lo cual quedaban 140 millones fuera de control. “ Estamos, por tanto, en una clara defensa del interés general pero al PP, al igual que en Tebeto o en Repsol, se le ve la patita”, remachó en alusión al PP.

No convencieron estas explicaciones al PP, pues, según Atona, todos los pasos dados por CajaCanarias fueron “en tiempo y forma” para constituirse en fundación, por lo que acusó a Rivero de actuar como “amo y señor” de las Islas. Además, le retó a dimitir en caso de que la Justicia lo desautorice, en alusión al recurso que los anteriores directivos de CajaCanarias, con Álvaro Arvelo al frente, han presentado contra esta intervención gubernamental en la caja.

Imagen de archivo de Asier Antona, en el Parlamento regional. / DA

Imagen de archivo de Asier Antona, en el Parlamento regional. / DA

ASIER ANTONA (PP): “ME HUELE A PODRIDO”

“El acuerdo adoptado por el Gobierno canario para intervenir en CajaCanarias huele mal; la gestora política que ha impuesto a la entidad huele peor, y la judicialización de este asunto ya es que huele a podrido”. Con esta metáfora escatológica resumió ayer la postura del PP el presidente del grupo parlamentario, Asier Atona, quien se preguntó además por qué el pasado día 3 de enero, justo cuando finalizaba el plazo para convertir CajaCanarias en una fundación, el Consejo de Gobierno de Canarias, reunido ese mismo día, no adoptó ninguna decisión al respecto, “sino que miró para otro lado” hasta el 27 de marzo. Antona destacó el hecho de que el Banco de España “acreditó” que no había objeción alguna para la creación de la fundación, por lo que no entiende las razones que llevaron al Gobierno canario a tomar una resolución desfavorable y tomar el control del proceso. Una medida con la que, a su juicio, el Ejecutivo autonómico ha dado una nueva vuelta de tuerca a su “alto grado de intervencionismo”, motivada por “la debilidad política de Paulino Rivero, que actúa por ajuste de cuentas y por los problemas internos que tiene en su partido”.