Dudas – Por José Antonio Felipe Martín

Cinco derrotas consecutivas, más la sufrida con el FC Barcelona en Copa del Rey, dan para mucho. Lo dan aquí y en la China, a pesar de que muchos se encarguen de hacernos creer que en Tenerife somos especialmente pesimistas cuando no creo que sea así. Más allá de formular sesudos análisis cestistas que, ahí sí digo, serán hechos por los muchos entrenadores de baloncesto que cada aficionado de la Isla lleva dentro de sí, sí entiendo como lógicas las dudas que puedan crearse debido a lo ocurrido en las últimas jornadas.

Es como despertarte de un sueño. En la jornada 14 el Iberostar Tenerife era sexto clasificado, con un balance de nueve victorias y cinco derrotas, igualado con el FC Barcelona, que era cuarto. Blagota Sekulic era el MVP de la competición y se habían disipado los rumores que apuntaban a una posible marcha, precisamente al equipo culé, y la Copa, dijeran lo que dijeran, estaba a tiro de piedra.

Desde ese 3 de enero, al 16 de febrero de ayer, los de Alejandro Martínez no han vuelto a ganar un solo encuentro, se han quedado sin Blagota, recibiendo el club aurinegro una cantidad económica que pertenece al secreto habitual que rodea al club en esos asuntos, y la experiencia copera, que fue histórica, acabó desde el momento en el que el mismo equipo que llega el próximo fin de semana a la Isla derrotó por 42 puntos a los aurinegros.

Hablaba ayer con varios compañeros y amigos y uno me decía que quizás vivimos en una burbuja que, ojo, desde el equipo y el club nunca fue alimentada, nos hacía ver las cosas de manera irreal. Es decir, que el nivel real del Iberostar Tenerife, al menos este, el de después de Blagota, da para ganar a rivales de menor empaque, pero que con equipos como Bilbao a domicilio o CAI en casa ya es un mérito enorme que pueda competir hasta el último segundo del último minuto.

Me decían que, dentro de esos malos resultados, el aprovechamiento que le está sacando Alejandro Martínez a su plantilla es casi milagroso -algo con lo que estoy de acuerdo- y que la baja de Fotis Lampropoulos es, más visto lo visto, terrible.

Es una pena, porque como Félix Hernández dijo recientemente en los micrófonos de Teide Radio, la sensación más desagradable que queda es que, cuando más aficionados al deporte, o al espectáculo en general, podían engancharse al equipo y a ir al Santiago Martín, han llegado los mejores resultados posibles.

Ayer solo 3.565 espectadores se acercaron a Los Majuelos a vivir en directo el choque. Sí, hubo lluvia, frío y mal horario. Esto no se trata de los anti y los pro, se trata de consolidar a un club en la ACB para que no se mueva de ahí en mucho tiempo. Creo, sinceramente, que los cimientos están puestos, a pesar de las dudas, lógicas y legítimas, de las últimas jornadas.