Un técnico reconoce que nadie les forma sobre el plan de seguridad

El diseñador prepara uno de los dos artefactos pirotécnicos, antes de la Gala. | DA

T. F. | Santa Cruz de Tenerife

El técnico del Organismo Autónomo de Fiestas que entregó a la policía el artefacto que no explotó y que portaba el traje de una candidata durante la gala de elección de la Reina adulta del Carnaval de Santa Cruz de Tenerife en 2013 reconoció ayer en el juzgado que no reciben formación específica sobre el plan de seguridad del que preceptivamente deben dotarse este tipo de festejos. Este técnico, llamado José Manuel Peraza, es el encargado de organizar los grupos, tanto para su ubicación como para el acceso al escenario.

La declaración de este técnico fue prestada ayer en el Juzgado de Instrucción número 1 de Santa Cruz de Tenerife, que investiga los hechos acaecidos aquel día y que ocasionaron gravísimas quemaduras a otra candidata, Saida Prieto. De momento, hay dos imputados por un supuesto delito de lesiones por imprudencia: el ahora exgerente de Fiestas, Francisco Trujillo, y el diseñador que llevó el fuego frío en uno de los trajes: Willy Jorge.

Entre otras cosas, Peraza detalló que el año pasado fue a un cursillo de seguridad en su oficina, pero no en el recinto, y que nunca ha sido instruido en conformidad con el plan de seguridad de la Gala. También insistió en que Fiestas desconocía dónde iba a utilizar Jorge el fuego frío, si en el escenario o en el traje. A este respecto, explicó que el diseñador comunicó su intención de utilizar dicho artefacto pirotécnico, pero que como no realizó la aclaración se le ordenó redactar una carta en la que debía indicarlo (en realidad, se la habría dictado el exgerente del organismo). Como Jorge no fue a por ella, se desentendió del tema y reconoce que en su escaleta sí ponía que habría fuegos fríos, pero seguía sin saber dónde.

Por lo que respecta a quién decidió que continuase la velada, no recuerda quién se lo dijo y que, cuando llegó al lugar del accidente, ya estaban limpiando la zona.

Sobre el segundo artefacto, el que no explotó, Peraza dice que se lo entregó un empleado de Hermanos Toste (la empresa encargada por la organización de la pirotecnia general) y que el otro lo tenían dos agentes de policía que iban de paisano.