La ONU alerta de una guerra regional en Oriente Próximo

Las luchas tribales se han extendido por Irak y amenazan con extenderse por todo Oriente Próximo. / reuters

EUROPA PRESS | Ginebra (Suiza)

Un equipo de investigadores de Naciones Unidas (ONU) ha alertado del riesgo de que el conflicto “sectario” que se está viviendo en Irak, con la ofensiva del Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS) en el norte del país, se propague a toda la región de Oriente Próximo.

Los milicianos del ISIS estuvieron tomando ciudades del norte del país desde la semana pasada, aproximando sus posiciones a la capital del país, Bagdad, con el riesgo de que el país se vea inmerso en una guerra civil con la influencia del conflicto en la vecina Siria. “Ya pronosticamos hace mucho tiempo los peligros de una propagación en los dos sentidos y ahora se está produciendo una propagación a nivel regional”, aseguró Vitit Muntarbhorn, un experto en Derecho Internacional que participó en el informe de los investigadores de Naciones Unidas. “Estamos, probablemente, en el umbral de una guerra regional, que es algo por lo que ya estábamos muy preocupados”, afirmó.

La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, alertó el lunes de que las fuerzas aliadas del ISIS que operan en el norte de Irak han incurrido con seguridad en crímenes de guerra al ejecutar a cientos de hombres no combatientes en los últimos días.

El informe presentado ayer ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas sostiene que la guerra en Siria está alimentada por fondos de otros países y milicianos suníes extranjeros y que los rebeldes y los milicianos del ISIS han cometido abusos de civiles en las zonas que controlan. “Una guerra regional en Oriente Próximo parece cada vez más cerca. Los hechos en el vecino Irak tienen violentas repercusiones para Siria”, alertan los investigadores de la Organización de Naciones Unidas en su documento.

“Un creciente número de radicales están atacando no sólo a las comunidades musulmanas bajo su control sino también a comunidades minoritarias como los chiíes, los alauíes, los cristianos, los armenios, los drusos y los kurdos”, denuncia el informe, que se refiere de este modo a los ataques de los milicianos suníes contra civiles suníes, incluida la presión contra sus mujeres para que cumplan la sharia y las represalias contra suníes que han trabajado con el Gobierno sirio.