La Laguna canaria – Por Domingo J. Jorge

En las tertulias de Zenón, en su centro fotográfico en La Carrera, a las que en más de una ocasión acudí los sábados por la mañana, se hablaba de lo humano y lo divino. Se hablaba hasta de “La Laguna canaria”. Se hacía bajo un concepto abierto de la posibilidad que nacía en San Cristóbal de La Laguna, siguiendo el concepto de ciudad universitaria, de ser, seguirlo siendo, esto lo añado yo, un claro ejemplo de apostar por Canarias, y por un lugar, Canarias, donde todos cabemos, y hacerlo desde esta ciudad, desde La Laguna.

Ahora, cuando a muchos, en ciertos círculos políticos y económicos, les vuelve a nacer la idea de que el Archipiélago se divide, de separación nuevamente entre las islas orientales y occidentales -mi opinión es que esto vuelve a suponer solo un espejismo teatralizado por algunos y sus intereses-, quizás ha llegado el momento de refrescar y aclarar que La Laguna no quiere separar, sino al contrario aunar, unir esfuerzos para que nuestra Canarias siga adelante. A muchos interesa, repito, empeñarse en que hay nuevas caras, sobre todo en la política, y hasta en el mundo empresarial, que apuestan por lo contrario, por separar Canarias, y además hacerlo desde La Laguna. Es evidente que sucede lo opuesto. Las relaciones, por ejemplo, entre la Universidad de La Laguna y la de Las Palmas son frecuentes. La vinculación empresarial entre ambas provincias, y que parte desde Aguere, pueden demostrarse de mil formas. Existen hasta colaboraciones entre empresarios de La Laguna, y Fuerteventura y Lanzarote.

Las relaciones institucionales tampoco son pocas. El Ayuntamiento de La Laguna trabaja y colabora con municipios de las Islas de la provincia hermana. Por eso, no sé de dónde vuelve a salir el empeño en la guerra por la división y el enfrentamiento, de La Laguna seguro que no. Muchos de nosotros, en nuestros años universitarios compartimos amistad, pupitre, y aula, y múltiples vivencias, con amigos de la provincia de Las Palmas. La Laguna, como aún recordamos cuando nos vemos, “era nuestra casa durante los nueve meses que duraba el curso”. Quienes se empeñan en querer reflotar el pleito insular, y poner como culpable a La Laguna, deberían recordar que hasta Los Sabandeños se han hermanado con las islas hermanas. Por eso recupero aquel “La Laguna canaria” de nuestro amigo Zenón, en días cercanos a las Fiestas del Cristo.