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Sanidad ve “muy improbable” la llegada del ébola a Canarias

   
Los traslados se realizan en cámaras en aviones medicalizados. | REUTERS

Los traslados se realizan en cámaras en aviones medicalizados. | REUTERS

JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife

“No hay sospechas de posibles casos en estos momentos, y es muy improbable que el virus del ébola llegue a Canarias”. Así de tajantes se mostraron ayer desde la Consejería de Sanidad del Gobierno autonómico, donde negaron categóricamente que se hayan detectado personas llegadas de países en riesgo con la enfermedad, como ha circulado estos últimos días en las redes sociales. Sanidad recordó además que tanto España como el propio Archipiélago cuentan con unidades y profesionales especializados en tratar el ébola. No en vano, los centros hospitalarios de referencia de las Islas cuentan con protocolos de atención “muy específicos” para controlar y tratar el virus, que ya se activaron cuando surgieron dos casos de sospecha de infección por ébola en España y que, finalmente, resultaron negativos.

En la misma línea que la Consejería regional de Sanidad se manifestó el catedrático de Parasitología de la Universidad de La Laguna (ULL) y director del Instituto Universitario de Enfermedades Tropicales, Basilio Valladares, que dejó claro que “es muy difícil que el ébola se introduzca en nuestros territorios”. “Es muy poco probable que el ébola alcance este país, y en el hipotético caso de que el virus se introdujera en España o en Canarias, la posibilidad de que se expandiese sin control es prácticamente nula”, recalcó el experto canario.

Y es que, según subrayó el parasitólogo tinerfeño, la transmisión del virus del ébola de una persona a otra sólo es posible mediante el contacto directo con flujos biológicos como la sangre, la saliva, el semen o el sudor. “Lo mejor que tiene el ébola es que no se contagia fácilmente, porque el virus no se transmite por agua, ni por aire, ni por otras vías que multipliquen las posibilidades de transmisión, y eso favorece enormemente que no aumente el problema”, denotó Basilio Valladares, quien expuso que los trabajadores sanitarios que atienden a pacientes con una posible infección “deben aplicar una serie de medidas de precaución para evitar el contacto directo con los pacientes, como guantes, escafandras y mascarillas”.

El Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) del Ministerio de Sanidad dispone de un procedimiento de actuación ante posibles casos de ébola en territorio nacional. Este protocolo, que se consensuó recientemente con los responsables de alertas sanitarias de las comunidades autónomas y se debatió en la última Ponencia de Alertas -en la que participan responsables de todas las regiones-, tiene como objetivo garantizar la detección y el diagnóstico precoz de un posible caso de ébola, con el fin de adoptar de manera inmediata las medidas de control adecuadas para evitar la aparición de casos secundarios. Según confirmaron desde Salud Pública, la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica cuenta ya con un protocolo general de vigilancia de las fiebres hemorrágicas -que caracterizan a este virus-, por lo que tanto la definición de caso como las medidas a seguir propuestas en este procedimiento están basadas en dicho protocolo de actuación. Y dado que no existe un tratamiento específico para el ébola en la actualidad, cuando se tiene sospecha de un caso se inicia un tratamiento intensivo de soporte del paciente afectado.

Los pasos
Traslados. El paciente debe ser trasladado en una ambulancia especialmente preparada -cuyo personal porte el equipo de protección adecuado- a una zona de aislamiento estricto, en un centro sanitario equipado convenientemente.
Control de residuos. El personal de limpieza del hospital y los manipuladores de ropa deben usar el equipo de protección adecuado al manipular el material o superficies potencialmente contaminadas.
Posible contacto. Si hay contacto físico directo con un paciente sintomático o con su sangre, orina o secreciones, o con sus ropas, ropa de cama o fómites contaminados con sangre, orina o fluidos, si se ha atendido al paciente o manejado sus muestras sin las medidas de protección correctamente utilizadas (contactos familiares, enfermeros, personal de laboratorio, de enfermería, de ambulancia, médicos, etc) se pone en marcha una vigilancia activa supervisada durante los 21 días posteriores a la última fecha de exposición a la infección.
Viaje en avión. Ante una sospecha de infección por ébola durante un viaje en avión se procede a identificar a las personas que durante el vuelo han tenido un contacto de riesgo, para la valoración del mismo. Además, se les informará de la sospecha, se recogerá la información para establecer contacto individual con ellos y se establece el seguimiento correspondiente.
Autopsia. Tampoco es posible realizar autopsia a los pacientes sospechosos de ébola, dada la elevada carga viral de los fluidos corporales. Se considera de alto riesgo quien ha tenido contacto con cadáver de persona fallecida por ébola o ha tenido contacto con un animal infectado con el virus.
El religioso afectado, ingresado en Madrid
El Hospital Carlos III de Madrid acoge desde anoche a Miguel Pajares, el religioso español de los hermanos de San Juan de Dios que dio positivo en las pruebas del ébola, que fue repatriado ayer a España desde Liberia.
Este centro, especializado en enfermedades epidemiológicas, se integró en el Hospital de La Paz y se ha transformado en un hospital de media estancia para atender a pacientes derivados de los hospitales públicos de la Comunidad de Madrid.

Las consultas externas y unidades diagnósticas continúan con su actividad en las instalaciones de La Paz mientras en el edificio actual del Carlos III se despliegan las consultas externas para las Unidades de Esclerosis Lateral Amiotrófica y Enfermedades Tropicales, así como la actividad de consultas externas, ambulatoria o de interconsulta que sea necesaria. La directora general de Salud Pública y Calidad e Innovación, María Mercedes Vinuesa, aseguró que la seguridad de los españoles está “absolutamente garantizada” con la repatriación a España del religioso de los hermanos de San Juan de Dios. “La seguridad está garantizada y el transporte cumple con todos los protocolos para atender al paciente y a los que viajan con él”, denotó Vinuesa, quien recordó que el ébola sólo tiene tratamiento de soporte, aunque se trabaja en fármacos experimentales.