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Canarias suma 4 años sin recursos para la integración de inmigrantes

   
Los mediadores interculturales también llevaban a cabo proyectos en centros escolares de las Islas. / DA

Los mediadores interculturales también llevaban a cabo proyectos en centros escolares de las Islas. / DA

JOSÉ LUIS CÁMARA | Santa Cruz de Tenerife

“De conformidad con los criterios y prioridades del Plan Estratégico de Inmigración, el Gobierno y las comunidades autónomas acordarán en la Conferencia Sectorial de Inmigración programas de acción bienales para reforzar la integración social de los inmigrantes. Tales programas serán financiados con cargo a un fondo estatal para la integración de los inmigrantes, que se dotará anualmente, y que podrá incluir fórmulas de cofinanciación por parte de las administraciones receptoras de las partidas del fondo”. Así de taxativo es el artículo 2 de la Ley de Extranjería, un texto que parece haber quedado en desuso con la excusa de la crisis. Eso es, al menos, lo que se extrae de la decisión del Gobierno del PP de dejar sin efecto para 2015 lo previsto en esa Ley Orgánica del año 2000, sobre los derechos y libertades de los extranjeros en España y su integración social.

De este modo, Canarias sumará cuatro años sin recibir fondos para esta materia, lo que incluso provocó que se suprimiera la Viceconsejería de Inmigración y ha obligado a medio centenar de profesionales a buscar alternativas laborales tras cerrar todos los proyectos específicos. “Cuando desapareció la Viceconsejería de Inmigración, que es la que se ocupaba de los temas de mediación, prácticamente desapareció la mediación intercultural en Canarias”, expone la presidenta de la Asociación Canaria de Mediadores Interculturales (Acamei), María José Piqueras. Esta asegura que las personas que ejercían esta labor en las Islas se han tenido que “reciclar” y “dedicarse a otros temas”. “Somos la única asociación que subsiste, pero tenemos muchos problemas para mantenernos”, subraya María José Piqueras, quien recuerda que la labor de los mediadores es muy amplia, y abarca desde los centros penitenciarios hasta los colegios, hospitales y servicios sociales municipales, ámbitos donde ahora nadie ejerce la mediación con los inmigrantes. La presidenta de Acamei, no obstante, va más allá, y deja claro que no sólo el Gobierno central ha dejado a cero las partidas para integración; entre 2007 y 2012 la ayuda del Ejecutivo canario para cooperación y ayuda al desarrollo pasó de 17,8 a 1,8 millones de euros, una caída del 90%, según datos del Ministerio de Asuntos Exteriores. “La gente que viene de fuera y que tanto nos ayudó a crecer, ya no interesa”, concluye María José Piqueras.

Un fondo de 200 millones de euros
-El Fondo para la Integración fue creado por el Gobierno socialista en 2004 con una dotación inicial de 7 millones de euros, aunque llegó a alcanzar los 200 millones en 2009, destinados fundamentalmente a apoyar los programas de las comunidades autónomas en la acogida a pie de playa, el aprendizaje de la lengua y el refuerzo educativo de los inmigrantes. El mismo gobierno socialista aplicó el primer recorte sobre el fondo cuando comenzó a abrirse paso la crisis en coincidencia, además, con un descenso de las llegadas de migrantes en patera.

-En 2009, sin embargo, el propio PSOE anunció una reducción del 30% en las partidas destinadas a esta materia, un tijeretazo que las ofensivas parlamentarias de CiU y el PP consiguieron revertir; aun así, en 2010 y 2011 la dotación se contrajo hasta quedar en 67 millones de euros. Paradójicamente, cuando el PP ganó las elecciones, el fondo fue de las primeras partidas en desaparecer, por las medidas de austeridad que adoptó el Gobierno de Mariano Rajoy en aras del cumplimiento del objetivo de déficit. Así, pasó a cero millones en 2012 y quedó suspendido por ley en 2013, 2014 y de nuevo en el ejercicio 2015.