X
CD TENERIFE > PREVIA

Vencer al invencible

   
Los blanquiazules examinan la fortaleza de                un Sporting que aún no sabe lo que es perder. / DA

Los blanquiazules examinan la fortaleza de un Sporting que aún no sabe lo que es perder. / DA

M.T. | Santa Cruz de Tenerife

El CD Tenerife arranca el nuevo año midiendose al único equipo de Segunda División que aún no sabe lo que es perder: el Sporting de Gijón. La del colíder es la primera de las tres pruebas de fuego que tienen los blanquiazules en el mes de enero en su feudo.

Álvaro Cervera tendrá que variar su once inicial para medirse al invencible conjunto astur, al no poder contar, por sanción, con el defensa central Carlos Ruiz. Además sigue sin estar disponible Unai Albizua, por lo que el técnico guineano debe decidir quién será la pareja de Hugo Álvarez.

El único recambio natural en la plantilla es el juvenil Jorge Sáenz, quien todavía no ha debutado en partido oficial. No obstante, la alternativa más lógica sería retrasar a Vitolo, dejando la medular para Aitor Sanz, quien reaparecerá, y Ricardo.

El resto no diferirá del que derrotó en el último partido de 2014 al Sabadell, con Ifrán en punta y Carlos Abad en la portería, el portero por el que parece que suspiran varios equipos punteros del país.

Sin embargo, la novedad más importante para el partido de hoy es la presencia en el banquillo del Heliodoro de Younousse Diop, canterano de origen senegalés. El jugador africano estrena convocatoria tras haber resuelto sus papeles.

Por su parte, el entrenador del Sporting de Gijón, Abelardo Fernández, repetirá la misma alineación que se impuso en la última jornada del pasado año al Alcorcón. El técnico no podrá contar con el lateral Alex Menéndez, el centrocampista Rachid y el delantero Carlos Castro, los tres por lesión.

El Real Sporting llega en un momento inmejorable a la isla, tras sumar 18 jornadas sin perder. No obstante esa fortaleza será examinada por un Tenerife que terminó 2014 con buenos resultados(sumó siete puntos de nueve posibles), pero sin mostrar un fútbol vistoso que anime a su sufrida afición.