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La capital de Soria y Tenerife > Carlos Alonso Rodríguez

En estos casi cien días de gobierno del PP, la isla de Tenerife se ha visto sometida a una serie de decisiones de graves consecuencias para el futuro económico de esta tierra. Cabría pensar que esta afirmación surge de un análisis provinciano, insularista y sin visión global, pero lejos de esta consideración más bien da la impresión que lo que estamos viviendo estos días es la muestra de una tendencia, de una corriente que va ser seña de identidad de este nuevo gobierno. Soria tiene puestas sus miras en una capital que no está precisamente en la Península y que es el centro de sus desvelos y de sus acciones. Energía, turismo y conectividad son tres asuntos claves, tres sectores esenciales para el desarrollo de las Islas. Y es precisamente en estos tres escenarios donde las últimas decisiones del PP quieren dejar a la isla de Tenerife fuera de juego.

Si entramos a valorar la primera de ellas vinculada a la supresión de las bonificaciones a las tasas aeroportuarias, que afectan gravemente a la capacidad de crecimiento de la conectividad de la Isla, no podemos obviar que la Isla que más ha crecido en términos de nueva capacidad aérea y nuevas rutas en el año 2011, distanciándose de esta manera de otros destinos del Archipiélago, es Tenerife. Solo así se entiende el empecinamiento de Soria de cortar la fuente principal de este crecimiento, las borificaciones, por encima incluso de lo que son sus propias competencias. Se adoptó esta medida sin entrar si quiera a valorar su mantenimiento o analizar posibles mejoras como podría ser, por ejemplo, primar el volumen o la llegada de pasajeros en los periodos valles de nuestra temporada turística. Sin duda, había que cortar esta fuente de riqueza que beneficiaba fundamentalmente a nuestra Isla y que explica en buena parte la consolidación en el líderazgo turístico de Tenerife.

La segunda acción que se debe explicar desde la perspectiva de la situación en Canarias y cómo afecta al equilibrio interinsular viene con la eliminación de las primas al desarrollo de las renovables. La Isla que cuenta con una mayor potencia instalada de energía fotovoltaica es Tenerife, que es también la Isla con más capacidad de crecimiento a corto plazo en este mercado, así como en el eólico.

En este sentido, las administraciones y el sector empresarial de la isla de Tenerife han demostrado una gran capacidad de crecimiento de este sector, por encima en estos años de cualquier isla, desarrollando un importante know how y creando empleo cualificado, pudiendo incluso desarrollar su actividad en otras islas. Paralicemos todo, dice el PP.

Curiosamente, el sistema de retribución especial para la generación de electricidad vinculada a la presa Chira-Soria sigue adelante. Ahora habrá que ver lo que es capaz de hacer para ralentizar la introducción de gas en Tenerife y adelantar su introducción en Gran Canaria.

La tercera medida es quizás la que menos explicación objetiva tiene, la que mayor desatino contiene y la que mayor desequilibrio produce. El centro de los desvelos de Soria aparece correctamente retratado en la Red Transeuropea de Transportes básica, que dejan relegadas a una segunda división las infraestructuras de Tenerife, perdiendo así la prioridad en la distribución de fondos nacionales y de la UE.

Y ello a pesar de que los aeropuertos de Tenerife reciben más de dos millones de pasajeros más y que el puerto de Santa Cruz de Tenerife tiene uno de los tráficos de mercancías y de personas más altos de España, mucho mayores en ambos casos que los que tienen algunos de los puertos y aeropuertos peninsulares incluidos en la propuesta del PP.

Pero mientras los representantes del PP de Tenerife permanecen callados o justifican con su abstención las medidas del líder, desde el Cabildo de Tenerife seguimos defendiendo los intereses de esta Isla con “armas y dientes”, como dijo el presidente Ricardo Melchior en el último Pleno. Pedimos que Gran Canaria mejore, que se le reduzcan las tasas aeroportuarias, que progrese todo lo que pueda en el desarrollo de las renovables, que sus infraestructuras cuenten con inversiones suficientes. Pero también, pedimos que traten de igual manera a Tenerife.

Que el PP de Tenerife defienda a la Isla y que no se ausente del debate por incómodo que pueda parecer. Esperamos respuestas para que nos quiten la razón en el pleito.

*Vicepresidente primero del Cabildo de Tenerife y consejero de Economía y Competitividad