JESSICA MORENO | Santa Cruz de Tenerife
“Si no se llega a un acuerdo en la negociación con los trabajadores sobre las medidas a tomar para reducir el déficit, en un periodo de 18 meses Titsa podría ir a la quiebra y desaparecer”. Así de contundente se mostró el coordinador de Movilidad del Cabildo de Tenerife, Manuel Ortega, en relación a las reuniones mantenidas en esta última semana entre la compañía dependiente de la Corporación insular y la falta de un acuerdo.
La empresa tiene como objetivo recortar para este año 7,5 millones de euros, de los cuales 4,8 tienen que ser del apartado de la plantilla. Por ello, hace dos semanas la compañía presentó un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que supone el despido de 117 personas. Con el fin de evitar esta situación, desde ese momento los sindicatos negocian con la empresa otras alternativas, como es el ERE temporal y una bajada salarial.
Ortega explicó a DIARIO DE AVISOS que la entidad está obligada a sanear sus cuentas y en caso de no cumplir con la estabilidad presupuestaria pone en riesgo todas las arcas insulares. Esto se debe a que la Corporación se acogió recientemente a la posibilidad de endeudamiento para el pago a proveedores, con la obligada elaboración de un plan de saneamiento. “Si el interventor no le da el visto bueno, porque no se ha llegado a un acuerdo en Titsa, el Ministerio lo rechaza, por lo que el hecho de alcanzar un acuerdo en la compañía es fundamental para la estabilidad presupuestaria de todo el Cabildo”, alertó el responsable insular de Movilidad.
Sin alternativas
Manuel Ortega señaló que la única alternativa viable para evitar los 117 despidos es aprobar el ERE temporal (que supone que toda la plantilla vaya al paro durante unos 15 días al año). “Parece que Intersindical Canaria (IC) y Comisiones Obreras (CC.OO.) esto lo han entendido, pero no los miembros de la Unión General de Trabajadores (UGT), y que este sindicato se desmarque supondría que esta medida no pueda adoptarse, porque para su aprobación es necesario un apoyo unánime”, declaró. “Si UGT no se suma al carro en estos encuentros se producirán los 117 despidos”, añadió el coordinador insular.
Ortega negó que el objetivo del Cabildo sea ir en la línea de la privatización de la compañía, como el pasado miércoles dio a entender el secretario regional de la formación sindical UGT, Gustavo Santana. “No tenemos intención, ni plan, ni previsión de ir en este camino”, aseveró.
[apunte]Fin del plazo
A pesar de que el jueves pasado fue la última reunión que tenían previsto realizar la empresa de transportes y los representantes sindicales, la falta de un acuerdo entre ambas partes ha hecho dilatar las negociaciones y, de hecho, el miércoles habrá un próximo encuentro. El objetivo es intentar lograr un entendimiento para evitar el despido de 117 empelados. Para ello tienen hasta el 10 de mayo, fecha en la que se vence el plazo de un mes desde que Titsa presentó el ERE. De momento, parece que aún queda bastante camino por recorrer. [/apunte]