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Berriel: “No se puede mover una piedra con estas cuentas”

YAZMINA ROZAS | Santa Cruz de Tenerife

El consejero de Obras Públicas, Transporte y Política Territorial del Gobierno canario, Domingo Berriel, afirmó ayer, en comisión parlamentaria, que el recorte al convenio de carreteras, en los presupuestos estatales, supone que “no hay posibilidad de mover una piedra” en lo que queda de año.

Berriel indicó que la previsión para este año de los recursos comprometidos era de 207 millones, por lo que la reducción hasta 68,5 millones deja a todas las obras en una situación “muy complicada”. Argumentó que los compromisos adquiridos actualmente por el Gobierno de Canarias con los contratistas ascienden a 211 millones, por lo que este recorte supondrá un “incumplimiento” con los mismos.

El consejero explicó que los casi 69 millones presupuestados “ya están ejecutados” y que, por lo tanto, “no hay posibilidad de mover una piedra” en lo que queda de año, ya que solo podría continuarse con las obras generando deuda y “no hay recursos en la comunidad” para ello, apuntó.

Domingo Berriel recordó que, además, el Ejecutivo canario tiene que pagar obras que cumplen este año o “nos veremos en un conflicto muy importante”, indicó.

El responsable de Obras Públicas recordó que ha solicitado una reunión urgente con la ministra de Fomento, Ana Pastor, para explicarle las consecuencias de esta reducción para el empleo y las obras de las Islas. Indicó que le trasladará propuestas alternativas de solución a este recorte “tan drástico”, por lo que el Gobierno canario está analizando en este momento obra por obra y buscando posibles soluciones.

A una pregunta de los populares sobre desviaciones presupuestarias en las obras públicas, Berriel contestó que el desfase está en torno al 26% de promedio, debido en su mayoría a variaciones de precios. Indicó que, por ello, el Gobierno canario será “más estricto” y va a incrementar las exigencias de rigor y detalle en los proyectos, así como la agilización de las expropiaciones.

Desde el PP se señaló que si esa desviación en lugar del 26% fuera del 13%, hoy “estaríamos en una situación más fácil” respecto al convenio.