La agresividad de las reformas que el PP está perpetrando sobre los servicios públicos básicos no solo nos conduce a un presente peor, sino que nos aboca a un futuro aterrador. El golpe que se está asestando a la Educación pública puede dejarla mortalmente herida, con unas tasas universitarias que van a dispararse, planes de educación infantil que se borrarán de un plumazo y disminución de los instrumentos que garantizan la equidad en el acceso a la educación: las becas.

Desde el PSOE de Tenerife, proponemos, como ya ha hecho el PSOE a nivel regional, un gran pacto social y económico por la Educación pública, que sirva de parapeto a la ciudadanía ante los duros recortes que se nos están viniendo encima. El primer objetivo de ese pacto, la razón misma de su existencia, debe ser combatir y desterrar la idea, falsa y retorcida, de que la educación es gasto, porque no lo es. Es inversión, inversión en lo mejor que tenemos, nuestro capital humano. De ninguna crisis se ha salido empeorando la educación de los ciudadanos.

Todos los agentes sociales deben estar implicados en este pacto. Los alumnos, porque son los receptores de la calidad educativa que reciban, y que va a marcar su futuro y el de Canarias. Los profesores, porque su trabajo debe ser respetado y puesto en valor, y sus opiniones tenidas en la consideración que merecen, al ser los que mejor conocen el día a día de las aulas y de los estudiantes. Los padres y madres, articulados a través de las Ampas, porque sin su implicación el trabajo escolar pierde su sentido y son una pieza fundamental del engranaje educativo. Los sindicatos, porque su labor es esencial para la defensa de la calidad educativa.

A esta iniciativa del PSOE, tanto en Canarias como en Tenerife, se contrapone el llamativo silencio del PP de la Isla, incapaz de salir en defensa de los tajos brutales que se está llevando la Educación pública, a todos los niveles, sencillamente porque no hay argumento alguno con el que ejercer de abogado del diablo. Nada dicen de la supresión del programa Educa3, de la suspensión del programa de infraestructuras educativas, de la subida de tasas universitarias, de la masificación en las aulas, del fin de los Campus de Excelencia, de las bajas que se dejarán de cubrir…

Si en algo hemos creído los socialistas, y así lo hemos puesto de manifiesto tanto en nuestra acción de gobierno como cuando hemos estado en la oposición, es en el valor de la Educación pública como instrumento de progreso, desarrollo, equidad y justicia social. Es espeluznante la facilidad con que el PP ha sacrificado un pilar de carga del Estado del Bienestar, para reducir el déficit estrangulando nuestro crecimiento. Desde el PSOE de Tenerife nos negamos a aceptarlo, y por ello tendemos la mano a todos los colectivos implicados en la Educación, y a toda la sociedad, para crear un frente común que defienda lo más valioso que tenemos. Nos jugamos el futuro.

*Vicepresidente y consejero de Bienestar y Sanidad del Cabildo. Senador por Tenerife