SUSANA NASSER | Santa Cruz de Tenerife
El entrenador tinerfeño Joaquín Lobón decidió realzar su carrera futbolística en la Guayana Francesa, región ubicada entre Brasil y Surinam, para entrenar al USL Montjoly (Union Sportive et Litteraire de Montjoly) de la Segunda División. “Mi mujer y yo queríamos salir de Tenerife y cambiar de aires. Uno de los factores importantes para tomar esta decisión fue poder aprender francés, para comunicarme mejor con la familia de mi mujer. Este cambio nos permitiría crecer en nuestros ámbitos personales y profesionales”, cuenta Lobón, que fue entrenador de equipos como el Atlético Arona, Regla, Real Unión o Perú, entre otros, además de dirigir dos temporadas en categoría nacional del fútbol femenino.
Su llegada al USL Montjoly surge cuando establece “contacto con la liga de Guayana así como con diversos clubes. Montjoly fue el que más interés mostró”, apunta y añade que “es un orgullo entrenar a un equipo como éste”. Y es que el Montjoly es un histórico de la zona, ya que ha sido campeón de la Copa Caribe. “Tenemos un estadio de 1.500 espectadores y lamentablemente no se llena cada domingo. Aún así, próximamente se ampliará a 4.000, con el objetivo de recibir a las selecciones nacionales previo a la Copa del Mundo de 2014 en Brasil, con el objetivo de que preparen aquí sus respectivas participaciones”.
Uno de los inconvenientes para Joaquín Lobón en sus inicios en el club fue el idioma, por lo que su mujer jugó un papel fundamental en sus funciones. “Cuando llegamos preparaba los entrenamientos con ella y escribía todas las explicaciones que quería dar en español y francés para luego pasar a la acción. Por momentos fue un poco frustrante. Sin embargo, a día de hoy puedo decir que el trabajo lingüístico ha dado sus frutos y tenemos un grupo que ha llegado a comprender mi filosofía de juego”, indica.
El técnico del Montjoly cuenta además con la presencia de una eminencia en el fútbol mundial, el exportero internacional Bernard Lama, que ha supuesto un gran apoyo para Lobón en su andadura. Así, dos meses después de su llegada, su mujer “se dirigía hacia el campo de fútbol y Bernard la paró: “Él ya puede volar solo”, le dijo.
Desde entonces empecé a dirigir en solitario, sin apoyo de traducción”.
El equipo francés realizó una gran temporada logrando la tercera plaza, aunque “lamentablemente nos hemos quedado a las puertas del ascenso”, objetivo que espera cumplir la próxima campaña.
Asimismo contempla la posibilidad de ejercer en “Francia, donde ya hemos iniciado contactos”. Además, en julio se desplazará a Lille, “para realizar una parte de la pretemporada con el LOSC (Lille Olimpique Sporting Club) de la Primera División”.
Sobre la Isla afirma que “es mi casa siempre, además quiero que mi hija conozca la tierra de su padre”, y deseó suerte al Tenerife: “aunque esto es una lotería, confío en el ascenso”, concluye la misma fuente.